El heredero de la corona española caminó durante un par de horas como un ciudadano más mientras visitaba las mesas de ayuda a la Cruz Roja de España donde estaban su madre, la Reina Sofía y su esposa, la Princesa Leticia.

Tras darse cuenta de que efectivamente era él, varios madrileños se acercaron para saludarlo y estrecharle la mano, lo que da cuenta de que a pesar de la crisis y los escándalos que había enfrentado, los españoles siguen valorando su monarquía.
Publicidad