Cuando David Beckham llegó como jugador a Los Angeles Galaxy en 2007, firmó una cláusula en su contrato que le permitía comprar una franquicia de un equipo de fútbol -por un monto cercano a los 25 millones de dólares-.

Hoy, el ex futbolista inglés ejerció su opción de compra en un equipo de Miami -que será el equipo 22 de la MLS-, anunciando el trato junto a Don Garber, comisionado de la liga estadounidense, y Carlos Giménez, alcalde de Miami.

Ahora, el “Spice Boy” debe conseguir el financiamiento necesario para echar a andar al equipo y el terreno para construir su estadio (que tentativamente estará en el centro de Miami), además de futbolistas para integrar el plantel. Ante ello, Beckham se mostró confiado pues, por su reconocida carrera, ya habría interesados.

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