El portero y capitán de la selección chilena, Claudio Bravo, se convirtió en campeón de la Liga Española junto al Barcelona.
Todo tras el triunfo del conjunto azulgrana por 3-0 sobre el Granada en la fecha 38 y final del certamen hispano.
El arquero, que no pudo actuar los dos últimos partidos por lesión, jugó de titular el resto de la temporada que llevó a su elenco a levantar la corona.
El cuadro catalán, que vio en su momento tambalear el liderato, se pudo reponer y logró sumar 91 puntos, uno más que su más cercano perseguidor, Real Madrid, que venció 2-0 a La Coruña, para quedarse con el trofeo.
En cuanto al desafío, la gran figura de la jornada fue el uruguayo, Luis Suárez, quien con un triplete (22’, 38’ y 86’ de penal) selló la victoria en la visita al Estadio Nuevo Los Cármenes.
Así el Barcelona mantiene su supremacía en tierras hispanas y logra registrar el título 24 en la historia del club culé.