Como brillante podría definirse en una palabra la goleada de Universidad de Chile contra O'Higgins por la segunda fecha del Clausura 2016.
Un 8-1 que, sin duda, será recordado por mucho tiempo en las huestes azules y que marcó un precedente importante en la historia del club.
El resultado frente al equipo rancagüino se convirtió en la segunda goleada más abultada en torneos oficiales por parte de Universidad de Chile.
El mismo marcador se dio en 1963 frente a Everton en el Estadio Nacional y en 1966 contra San Felipe en un partido disputado en Santa Laura.
Al equipo dirigido por Sebastián Beccacece le faltó sólo un gol para igualar el 9-1 que se dio frente a Magallanes en diciembre de 1962.
Aquel equipo era dirigido por Luis Álamos y tenía dentro de sus figuras a Rubén Marcos, Leonel Sánchez y Carlos Campos. Su marca hasta hora no ha podido ser ni igualada ni menos superada.
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