"No sé lo que me pasó", dijo Luis Figueroa Bastidas, luego de que se le decretara prisión preventiva por el delito de abuso sexual contra dos menores en Punta Arenas.
El hombre de 53 años participaba de un paseo familiar en Ojo Bueno, sector norte de la ciudad austral, cuando realizó tocaciones y actos de significación sexual a dos niñas de 13 y 4 años.
"En ese lugar había una casa, donde un trabajador del lugar, procedió a realizarle tocaciones a ambas niñas, y tras la denuncia realizamos la investigación y se detuvo en el cuartel de la PDI, una vez que se citó a prestar declaración y donde reconoció su participación en los hechos que se le imputan", dijo el subcomisario Milton Bazán, jefe subrogante de la Brisexme de la Policía de Investigaciones (PDI).
Según el relato del autor confeso de los delitos, vio a la menor de 13 años acostada con audífonos y le dio una palmada en el trasero para despedirse. Posteriormente, vio a la otra niña y, de acuerdo a su declaración, "le puse mi cara en su entrepiernas pasando mi lengua sobre su ropa, hasta que llegó su papá. Tomé mis cosas y me empezaron a insultar y pegar, me lanzaron piedras a mi casa".
Figueroa Bastidas no tiene parentesco con las niñas pero sí conocía a la familia. Tampoco cuenta con antecedentes penales.
El plazo para el cierre de la investigación se fijó en 60 días.
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