Este lunes el Presidente de Argentina, Mauricio Macri, anunció un tope de 400% de aumento para los usuarios residenciales de gas y de 500% para clientes comerciales, comparados con los montos facturados en el mismo bimestre del 2015.
Según explicó el Mandatario, en la práctica, esto se traduce en "más allá de cuánto consuma, a ningún usuario le aumentará su factura de gas más de 400% en hogares o 500% en empresas. El tope es retroactivo y rige desde el 1 de abril".
El presidente argentino hizo este anuncio en horas decisivas para que su gobierno defienda los bruscos aumentos que detonaron protestas de vecinos y entidades civiles en todo el país y que llevó a la justicia a frenar la aplicación de las nuevas tarifas.
De acuerdo al Mauricio Macri, "enfrentamos un problema de escasez de energía y cada año consumimos más".
"Durante la última década pasamos de exportar gas a importarlo. Necesitamos moderar nuestro consumo y volver a producir para recuperar el equilibrio energético, mientras atendemos en la transición a las familias que más lo necesitan, agregó".
Las facturas de gas y electricidad sufrieron aumentos que en promedio rondan entre el 500 y 700% y en algunos casos alcanzó el 2.000% incluso en la Patagonia, donde la calefacción es casi imprescindible.