Así lo informó el jefe de la guardia presidencial, general José Orellana, quien agregó que el fallecido mandatario estuvo consciente hasta el último minuto. “No podía hablar, pero lo dijo con los labios...’Yo no quiero morir’”, dijo.
Orellana, quien acompañó a Chávez durante sus últimos dos años de vida, manifestó este jueves que un infarto “fulminante” anticipó su fallecimiento. “Él quería a su país, se inmoló por su país”, agregó el funcionario.
El hombre añadió que a pesar del esfuerzo del equipo médico por salvar al gobernante, el cáncer que "estaba bastante avanzado" finalmente terminó por acelerar el deterioro de Hugo Chávez.
"Sufrió bastante. Sufrió mucho con esa enfermedad. Y bueno, la historia la escribiremos, y algún día alguien escribirá, y algún día el médico escribirá", destacó.