Cada cuatro años, los futbolistas de élite del mundo entero esperan figurar en dos listas. Una es la de los 23 convocados para hacer parte del Mundial de Fútbol.

Pero hay otra primero: la de las 18 caras de cada selección que conforman el álbum de figuritas más famoso de la Copa del Mundo, el que produce la editorial italiana Panini. El álbum, que se distribuye en 125 países y registró ventas en 2014 por US$300 millones, es una cita obligada de los coleccionistas.

Algunas veces, las dos listas coinciden. En otras, los jugadores son convocados al Mundial pero no aparecen en el álbum.

Y en otros casos menos frecuentes y más tristes, ocurre a la inversa: hay quienes quedan registrados en el libro de stickers pero no viajan al torneo. En algunos casos, hasta en dos Mundiales consecutivos.

Pero, ¿por qué pasa esto?

"Hay un equipo periodístico y técnico dentro de Panini que decide qué jugadores formarán parte del álbum. Se lleva un seguimiento de las selecciones durante las eliminatorias y amistosos", explicó Nicolás Sallustro, coordinador de marketing de Panini en Argentina.

"También se sigue a los jugadores en sus clubes y se estudia el momento futbolístico de cada uno para luego armar la lista de 18 jugadores", añadió.

En BBC Mundo te mostramos algunas de las historias más curiosas de jugadores que fueron convocados al Panini, pero nunca pudieron cumplir el sueño del Mundial. (Al menos hasta ahora).

John Jairo Tréllez, Colombia

El delantero colombiano despuntó en el Sudamericano Juvenil de 1985 y después se convirtió en figura del Atlético Nacional que fue campeón de la Copa Libertadores de 1989.

Tal vez por esa razón cuando la editorial hizo la selección de los jugadores colombianos que iban a hacer parte del álbum de Italia 90 no dudó en poner a la "Turbina", como se lo apodaba, entre los elegidos para las figuritas autoadhesivas.

Sin embargo, cuando el entonces técnico de la selección Colombia, Francisco Maturana, eligió la nómina definitiva, Tréllez se quedó por fuera.

Y no contento el destino, cuatro años más tarde, para el Mundial de Estados Unidos 1994, la historia se repitió: Tréllez había hecho parte del exitoso ciclo clasificatorio -que concluyó con el épico 5-0 frente a Argentina-, volvió a ver su figura en el álbum, pero otra vez, el mismo técnico lo dejó afuera.

"Creo que fui de los jugadores que nunca le pidieron explicaciones a un técnico. Así como nunca le pregunté por qué me metiste, tampoco le pregunté por qué me sacaste", le dijo a la revista colombiana Semana.

Los cinco peruanos de Argentina 78

Una de las alegrías que se extendieron en el continente americano fue la clasificación de Perú a Rusia 2018. Después de 35 años, el país sudamericano está de regreso a un Mundial.

Y por supuesto, al Panini.

Pero su última participación, en Argentina 1978, también estuvo marcada por la anécdota: tuvo uno de los casos más curiosos. En esa ocasión fueron cinco jugadores los que vieron sus fotos en el álbum coleccionable pero no llegaron a disputar la Copa del Mundo.

Se trató de Humberto Horacio Ballesteros, portero nacionalizado argentino y a quien el gobierno de turno no le permitió representar a Perú en el Mundial; Alejandro Luces, delantero; Julio Aparicio, delantero del Alianza Lima; Eleazar Soria, lateral que jugó varios años en Independiente de Argentina.

Pero tal vez el caso más llamativo haya sido el de Julio Meléndez. El defensor peruano había sido una leyenda en Boca Juniors de Argentina, donde había jugado hasta 1972, y además había llevado la banda de capitán de la selección peruana durante la etapa de clasificación.

Sin embargo, tampoco lo incluyeron en la lista de jugadores que disputaron el Mundial, donde Perú llegó hasta la fase de cuartos de final, y su hazaña no pasó de ser un rostro en las figuritas para pegar en el Panini.

Moisés Muñoz, México

El actual portero del Jaguares de México era tal vez uno de los jugadores más felices cuando salió el álbum del Mundial de Brasil 2014.

Su foto hacía parte de las 18 seleccionadas para ilustrar a la selección mexicana. Y eso elevaba sus esperanzas de ser parte de la nómina definitiva del "Tri" para la Copa del Mundo.

Aunque había sido convocado por el técnico Miguel "El Piojo" Herrera sólo para algunos partidos de las eliminatorias, "Moi" -como se lo conoce- había sido un hombre clave en la serie de repechaje ante Nueva Zelanda.

Sin embargo, a la hora de dar el listado final, Muñoz no fue considerado para ser uno de los tres porteros manitos.

"No voy a decir que fue una injusticia, pero sí creo que he merecido estar. No como arquero titular, pero sí como uno de los jugadores del plantel, representando a mi país", le dijo Muñoz al diario mexicano Milenio.

Ahora espera que la situación se revierta: esta vez,: no está en las figuras del álbum de Rusia 2018, espera quedar dentro de la lista de convocados de Juan Carlos Osorio.

Andrés D'Alessandro, Argentina

Andrés D'Alessandro fue una de esas maravillas que River Plate lanzó al mundo del fútbol a finales del siglo XX, junto a Javier Saviola y Pablo Aimar.

Destacó por su gran agilidad y rapidez dentro del mediocampo. Sin embargo, a pesar de su talento, nunca fue tenido en cuenta por los técnicos argentinos para los Mundiales de 2002 y 2006.

Pero lo más extraño ocurrió en 2010. Durante los meses previos a la Copa del Mundo en Sudáfrica, D´Alessandro estaba firmando una de las mejores temporadas de su vida con el Internacional de Porto Alegre: habían salido campeones del torneo brasileño y estaban clasificados a la semifinal de la Copa Libertadores (que finalmente ganarían).

Argentina, por su parte, había masticado clavos para clasificarse al Mundial y la buena temporada de D'Alessandro le permitía creer a los diseñadores del álbum Panini que no era descabellado que fuera uno de los convocados para el Mundial.

Pero Diego Maradona, el técnico de la época, decidió que tal vez sí era un desatino y lo dejó fuera de Sudáfrica 2010.

"No me convocó ni para probarme, y en esa época se probaron más de 130 jugadores. Me pareció medio raro. Nunca lo hablé, pero en off se saben cosas. Para mí el Diego sigue siendo el Diego, pero en otro ámbito él fue entrenador y yo fui jugador", le dijo D'Alessandro al diario argentino La Nación.

Samir Nasri, Francia

Samir Nasri es el clásico ejemplo del talento superlativo combinado con un carácter explosivo y volátil, que se ha repetido en la historia del fútbol desde la aparición del genial George Best, pasando por Paul Gascoigne y Mario Balotelli.

Nasri fue designado como reemplazo del gran mediocampista francés Zinedine Zidane - con quien además comparte ascendencia argelina-, cuando éste se retiró del fútbol en 2006.

Participó en la Euro de 2008 y, cuando todo parecía indicar que sería una de las estrellas del Mundial de Sudáfrica 2010, el entonces técnico Raymond Domenech no lo tuvo en cuenta ni siquiera para la lista preliminar.

Sin embargo, el verdadero lío llegó en 2014. Nasri había tenido un par de buenas temporadas en el Arsenal inglés, había estado con Francia en la Eurocopa de 2012 y creía firmemente en que podía llegar a ser parte de la selección para el Mundial de Brasil.

El álbum de Panini de ese año consideró lo mismo y lo incluyó en sus 18 seleccionados.

Pero Didier Deschamps, el técnico galo, tenía otras ideas y lo sacó de la convocatoria final. Anara, la novia de Nasri de ese entonces, definió el asunto con una publicación en su cuenta de Twitter: "Que se joda Francia, que se joda Deschamps, qué mierda de entrenador".

Desde entonces no ha vuelto a lucir la camiseta de "Les Blues".

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