La norcoreana Kim Kuk Hyang se proclamó campeona del mundo de clavados en salto de 10 metros femeninos y dio a su país la primera medalla de la disciplina este jueves en el Mundial de Natación que se disputa en Kazan (Rusia).
Así, la joven de apenas 16 años se transformó en una verdadera "heroína" en su país, gobernado por la férrea dictadura comunista de Kim Jong Un. Kim Kuk Hyang obtuvo una puntuación de 397,05, casi 10 más que la china Ren Qian (388,00), mientras que el bronce fue para la malasia Pamg Pandela Rinong Anak (385,05).
Con su medalla de oro colgada al cuello, Kim lloró al momento de la premiación, mientras escuchaba y cantaba el himno de Corea del Norte. “Quiero dar las gracias a todos por su apoyo. He apreciado cada momento de esta final. Quiero expresar mi gratitud a mi país”, dijo emocionada. Incluso, homenajeó al gobernante de Norcorea, al señalar que "me da un gran placer lograr las expectativas de mi gobierno y de nuestro gran líder".
Según informa la cadena ESPN, la clavadista ingresó a ese deporte a los 12 años. Kim dijo que se dedica cinco horas diarias a la práctica (de 3:00 a 8:00 horas), en las que desarrolla unas 40 inmersiones. “Cuando vuelva a mi país, toda la gente vendrá a la calle para darme la bienvenida. Haré todo lo que pueda para ganar la medalla de oro en los Juegos Olímpicos del próximo año”, señaló.