El Real Madrid se proclamó campeón de la Supercopa de España este domingo al golear al Barcelona 4-1 en el estadio Al-Awwal de Riad, impulsado por un triplete del brasileño Vinicius. Además, alcanzó un histórico dato de Iván Zamorano con la camiseta merengue.
'Vini' abrió el marcador (7), repitió apenas tres minutos después (10) y cerró su cuenta de penal (39), haciendo inútil el golazo de Robert Lewandowski (33) tras la sentencia de Rodrygo en el segundo tiempo (64).
"Hemos ganado con mérito. Hemos empezado muy bien, hemos encontrado a Vinicius en un momento extraordinario", afirmó el técnico merengue, Carlo Ancelotti, tras el partido.
El Real Madrid se resarció de su derrota ante los azulgranas en la final de la Supercopa del pasado año e impidió que el Barça se tomara la revancha de la derrota en Liga en octubre.
El Real, ganador de tres de las cuatro ediciones en que la Supercopa se ha disputado en Arabia, salió desde el minuto uno a por un Barcelona, que terminó el partido con diez por la expulsión del uruguayo Ronald Araujo (71).
Los blancos sólo necesitaron diez minutos para poner el partido a su favor en un estadio Al-Awwal lleno.
"Hemos entrado de la peor manera a una final, hemos estado a remolque todo el partido", consideró el entrenador del Barça, Xavi Hernández, tras el partido.
El histórico dato de Zamorano que alcanzó Vinicius contra el Barcelona
Ni Cristiano Ronaldo, ni Ronaldo, ni Zidane, ni Raúl, ni Michael Owen, Karim Benzema (que estuvo cerca) o Ruud van Nistelrooy, pudieron alcanzar un dato que el exfutbolista nacional Iván Zamorano mantenía con la camiseta del Real Madrid.
El otrora delantero y capitán de "La Roja" fue hasta el partido de este domingo, el último delantero de los merengues en anotar un hat-trick (tres goles) en el primer tiempo contra el FC Barcelona en El Clásico.
A pesar de la gran lista de delanteros que pasaron por el cuadro español, sólo el chileno logró anotar tres goles en los primeros 45', cuando en la temporada 94-95 el Real Madrid le propinó un 5-0 a los catalanes.
Esa fue la temporada donde "Bam-Bam" lograría consagrarse como pichichi (máximo goleador de La Liga) y campeón del certamen con el Real Madrid.