La economía chilena sigue su camino de desaceleración. El Banco Central informó este viernes que el PIB en el tercer trimestre creció un 0,3%, respecto dea igual trimestre del año pasado. La cifra es levemente superior a lo esperado por el mercado, que la ubicaba en 0,2%, y se tranforma en el menor desempeño desde el tercer trimestre de 2020. 

El informe destaca el crecimiento de los servicios, en particular de los servicios personales y el transporte. Contrarrestaron lo anterior, las caídas del comercio y la minería, principalmente.

La demanda interna ya muestra cifras negativas al reducirse 1,5%, en línea con un menor consumo de los hogares, según el Instituto Emisor. 

El Banco Central en su Informe de Política Monetaria (IPoM) de septiembre estimaba que la economía chilena cerraría durante 2022 entre 1,75% y 2,25%. Para 2023 el Central asumió que la economía caería en recesión con una caída de entre -0,5% a -1,5%.

Cae consumo de hogares

El Banco Central señaló que la contracción de 1,5% de la demanda interna se explicó por el desempeño del consumo de los hogares y, en menor medida, de la inversión. El consumo privado cayó 2,8%, reflejo de un menor gasto en bienes, particularmente de no durables. En contraste, el consumo de servicios aumentó.

La variación de existencias, en tanto, incidió negativamente en el resultado de la inversión, lo que se explicó principalmente por menores stock de productos industriales. En tanto, la formación bruta de capital fijo (FBCF) aumentó 2,2%, liderada por una mayor inversión en maquinaria y equipo.

Asimismo, las exportaciones aumentaron 4,1% en el tercer trimestre y las importaciones se redujeron 2,7%. En el primer caso, el resultado se explicó principalmente por el dinamismo de las exportaciones de servicios, seguidas por los envíos de bienes. En el resultado de las importaciones destacaron las menores internaciones de productos tecnológicos y petróleo crudo.

Publicidad