El presidente Alberto Fernández decidió no sancionar al embajador de Argentina en Chile, Rafael Bielsa, tras el lío diplomático generado por sus dichos sobre el candidato presidencial José Antonio Kast.
Fue durante este lunes, posterior a la primera vuelta presidencial, que el representante del país trasandino abordó la figura del abanderado del Partido Republicano, apuntando que Kast es "pinochetista" e incluso "antiargentino".
"Kast ha exhibido su anti-argentinismo como una etiqueta más de las frases que pronuncia. Desde decirnos que hemos robado históricamente territorios, que tenemos que dejar de robar territorios a Chile, hasta todo tipo de expresión xenófobas", complementó en esa línea.
Lo anterior le valió un flanco de cuestionamientos desde el Gobierno del Presidente Sebastián Piñera, pues catalogaron sus dichos como una "intromisión inaceptable" y rechazó las declaraciones del embajador.
Tras esto, la vocera del Gobierno de Alberto Fernández, Gabriela Cerruti, sostuvo que "los funcionarios, a los que nos parece un deber y responsabilidad contestar siempre todo lo que la prensa nos pregunta, a veces hacemos declaraciones inadecuadas".
"Todas las declaraciones de los funcionarios terminan siendo públicas, por lo que la prudencia debería ser mandato para todos nosotras y nosotros", agregó, según rescató La Nación de Argentina.
De paso, descartó que se adopten sanciones contra Rafael Bielsa, pero aclaró que el mandatario argentino estaba desagradado con las "opiniones personales" del embajador.