Luego de una pacífica inscripción de los candidatos a las primarias presidenciales de Chile Vamos -a comparación con la bullada negociación opositora-, las aguas en la centroderecha comenzaron a moverse este fin de semana.

“Sichel es un candidato inventado, que no ha ganado nunca una elección y que ha transitado en todas las tiendas política imaginables”, dijo este viernes el alcalde de La Florida, Rodolfo Carter, en su estreno como vocero de la campaña de Joaquín Lavín. “Es una creación de La Moneda”, remató en El Mercurio.

Y desde el comando de Sebastián Sichel -independiente-, el coordinador político Juan José Santa Cruz salió a responder y apeló a que el edil solo representa la “vieja política”.

Los involucrados, en todo caso, Lavín y Sichel, también se refirieron a las diferencias públicas. “Me interesa la unidad, sobre todo después del domingo, el diálogo en Chile es más necesario que nunca. Me interesa resaltar mi propuesta por sobre la diferencia con los demás y en eso vamos a estar”, dijo Lavín en Tolerancia Cero; mientras Sichel el mismo día que Carter lo criticó, en un punto de prensa, afirmó que “aparece un independiente que puede ganar la elección y lo que hay que hacer es pegarle en las cañuelas inmediatamente”, en relación al comportamiento RN y UDI.

En entrevista con La Tercera días después ahondó en el tema y dijo que le extrañaba que el vocero de Lavín no esté entendiendo nada de lo que pasó en las elecciones recién pasadas. “Ojalá no estemos viendo el viejo juego del policía bueno y el policía malo”, señaló Sichel.

El enfrentamiento público fue la antesala de los resultados de la encuesta Cadem de este lunes donde prácticamente Lavín y Sichel aparecen a la par, sobre todo en mediciones hipotéticas en segunda vuelta presidencial. Ambos exministros de Desarrollo Social se posicionan con un 37% de respaldo al ser enfrentados con la carta comunista, Daniel Jadue.

Primarias opuestas a 2017 y el pesimismo en la derecha

Lo primero que relevan en el sector al analizar las primarias presidenciales de la centroderecha es que esta vez Chile Vamos enfrenta un escenario totalmente distinto a 2017, cuando Sebastián Piñera, Manuel José Ossandón y Felipe Kast buscaban pasar a segunda vuelta. Entonces con Michelle Bachelet en el gobierno y su popularidad a la baja, el conglomerado refundado buscaba dar una alternativa ante una desgastada Nueva Mayoría.

Esta vez, el escenario es de pura incertidumbre, recalcan. Los negros resultados de las megaelecciones del domingo pasado -donde la derecha ni siquiera alcanzó a ser representado por el tercio de los constituyentes y perdió comunas emblemáticas en Santiago- provocan que incluso en la presidencial el día de la elección sea insospechado.

En paralelo, subrayan en Chile Vamos, el estado de ánimo del sector es pesimista, por lo que es un desafío lograr que en esta primaria éste mejore y finalmente logren movilizar a la centroderecha y sus simpatizantes. En 2017 convocaron a un millón y medio de personas; ahora, esa cifra sería la meta, aunque, admiten, complejo de superar e incluso de igualar. Este lunes, el presidente de la UDI, Javier Macaya, dijo que desde ya comenzarán un intenso despliegue territorial por todo el país para lograr óptimos resultados en la primaria planificada para el 18 de julio.

¿Cuál es la estrategia? Vieja política versus inexperiencia

“Esto siempre fue Sichel-Lavín y hoy para algunos resulta evidente por las cifras que nosotros siempre hemos tenido y, también, es Sichel-Lavín por el contexto político que hoy existe”, dice Santa Cruz a T13.CL, en relación a lo que se ha instalado luego de la inscripción ante el Servicio Electoral.

En ese sentido, en ambos equipos admiten que la primaria se avizora entre Lavín y Sichel, pues son los que hoy gozan de mayor adhesión ciudadana. Mientras, por ejemplo, es mirado desde esos comandos, que Mario Desbordes hoy además oficia de candidato a la presidencia de RN, lo que, dicen, es un riesgo y una señal de distancia con el real triunfo en esta primaria.

Ignacio Briones (Evópoli) aparece en esta Cadem con un 3% en las preferencias presidenciables, cifra que en todo caso no es distante de la de Desbordes (4%). Lavín y Sichel, en tanto, obtienen un 16% y 11% respectivamente.

Desde el equipo de Lavín afirman que, tal como adelantó el propio edil en sus entrevistas del fin de semana, buscará marcar diferencias con ideas, propuestas en torno a ejes como la integración social, el “cambio profundo, pero responsable”; entre otras.

En ese sentido, desestiman que los dichos de Carter hayan sido parte de un mapa estratégico. Macaya, de hecho, aseguró este lunes que las críticas del edil se dieron antes de que fuera nombrado como vocero. Eso sí, el diputado señaló que el alcalde deberá acostumbrarse a este nuevo rol.

Así, dicen en Chile Vamos, las diferencias se irán marcando, por un lado, desde Sichel, relevando su condición de “independiente” y de “frescura” para la política; mientras el “lavinismo” destacará la experiencia de su líder, su capacidad para entregar soluciones innovadoras a los chilenos y, por sobre todo, que es el mejor preparado para enfrentar a Jadue.

“Me llama mucho la atención tanta gente, hoy, tan de moda ser independiente, apolítico, o nuevo y vemos que la mayoría de los independientes tiene domicilio político y la verdad es que hay otros que apelan a la novedad llevando más de 20 años en política, entonces, poner como eje central el tema de la juventud o de la independencia, creo no es la respuesta que Chile está esperando”, dijo este lunes la secretaria general de la UDI, María José Hoffmann, al ser consultada por Sichel aunque precisó no estar respondiéndole a él ante la polémica.

¿Fin al fair play? “Nosotros siempre hemos actuado dentro del fair play, en una actitud constructiva y nunca atacando a nadie. Ahora, frente a distintas agresiones, contestamos y eso es muy distinto”, responde Santa Cruz.

Con todo, aún restan ocho semanas para la primaria presidencial del sector.

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