Tal como habían adelantado, Kodak presentó en la feria CES su primer smartphone propio, el IM5. Este aparato ofrece dos cámaras, las que prometen hacer la diferencia: una trasera de 13 megapixeles y una delantera de 5 MP, para las selfies.

El IM5 cuenta con una pantalla HD de cinco pulgadas, un procesador de ocho núcleos a 1,7GHz y sólo 1GB de memoria RAM. Además cuenta con una versión simplificada de Android KitKat y una aplicación para editar fotos y mandarlas a imprimir fácilmente.

"Es simple, intuitivo y ofrece acceso rápido a funciones clave como llamar, mensajes, cámara y contactos. Además, viene con un programa para el manejo remoto que permite a amigos de confianza y la familiar entregar ayuda a través de un PC o tablet", explicó la empresa.

Llegará en blanco y en negro, y su precio será de 249 dólares, según el sitio The Verge. En ese medio afirmaron que es muy liviano, pero que las cámaras no eran mejores que las del iPhone. Arribará a Europa a fines del primer trimestre.

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