Qué hay de nuevo. Detrás de un vidrio blindado, y fiel al libreto fijado durante los últimos días —que mantendrá durante la campaña de segunda vuelta—, en la celebración con sus adherentes José Antonio Kast (23,93% con el 99,15% de las mesas escrutadas) planteó que “la oposición derrotó a un gobierno fracasado (…). Esta noche Chile sí despertó, pero despertó de verdad”.
- Al igual que en su cierre de campaña, llamó a “no engañarse” en relación a su competidora: “Jeannette Jara es Gabriel Boric, con un tono de voz distinto (…). Si ella gana, el PC gana”. Asimismo, aseguró que “la elección del 14 de diciembre no será una elección cualquiera. Será la elección más importante de nuestra generación. Será un verdadero plebiscito entre dos modelos de sociedad”.
- E insistió: “El único adversario que tenemos es el continuismo, y a ese continuismo lo vamos a derrotar el 14 de diciembre”.
Gestos de unidad. Tras reconocer su derrota en una breve alocución, Evelyn Matthei —quien quedó quinta, con un 12,48%— acudió a la sede del comando de Kast para felicitarlo por su paso a la segunda vuelta.
- Flanqueada por el candidato republicano y por líderes de Chile Vamos, la exalcaldesa de Providencia llamó a los votantes de su bloque “y a Amarillos y Demócratas también, a que, por favor, apoyen en segunda vuelta al candidato Kast, porque es súper importante que no continúe este gobierno en el poder (…). Es muy importante dar un cambio de timón fuerte al gobierno”.
- “Hemos venido acá todas las personas que me han acompañado durante la campaña. Por lo tanto, hemos venido como corresponde, porque Chile siempre está primero”, sostuvo Matthei.
- Con sobriedad y sin triunfalismos, Kast agradeció el respaldo de Matthei y su equipo, y planteó: “Lo que nos convoca es el bien de Chile. Y para lograr el bien de Chile y salir de la crisis en la que estamos, tanto en seguridad, economía, como en áreas sociales, la unidad es fundamental”.
- “Tenemos todavía un mes para seguir trabajando (…). Y estoy seguro de que trabajando en unidad con los distintos equipos, con las personas que nos ha tocado representar a las distintas corrientes de la centroderecha, de la derecha, podemos recuperar y reconstruir nuestra patria”, añadió el líder republicano, quien realizó su alocución acompañado de su esposa Pía Adriasola.
- Kast afirmó, asimismo, que “Chile es más importante que los partidos, más importante que las distintas personas que levantamos estas propuestas. Podemos haber tenido diferencias, y es así, en la vida se dan diferencias, incluso dentro del mismo sector, pero esas diferencias no tienen comparación alguna con lo que vemos al frente”.
- “Te agradezco personalmente a ti por el gesto democrático que has tenido de venir y solicitar lo mismo, unidad para Chile”, agregó.
- Quien también acudió al comando republicano fue Johannes Kaiser, que quedó cuarto con 13,93%, y sostuvo tras reconocer su derrota que “votar por José Antonio Kast hoy en día es votar por Chile”. Kast agradeció ese gesto.
Por qué importa. Existía temor en la derecha de que se repitiera lo ocurrido con Sebastián Sichel en 2021, cuando condicionó su apoyo a Kast en el balotaje a la entrega de una carta de compromisos. Se buscaba evitar que la demora en los respaldos termine afectando al candidato y abrir rápidamente todos los canales necesarios para el despliegue de la segunda vuelta.
- En entrevista con Ex-Ante, el director del Centro de Políticas Públicas UDD, Gonzalo Müller, señaló que “quien gane va a tener 24 horas para demostrar que verdaderamente es capaz de integrar a todos en un equipo para enfrentar la segunda vuelta”.
- Pero también, según analistas, tanto Chile Vamos como el Partido Nacional Libertario arriesgaban volverse irrelevantes en caso de no acoplarse al ganador.
- En días previos, Matthei —quien vio el conteo de votos en su comando junto a su comité político— había puesto en duda realizar un gesto de apoyo al ganador, y hasta la mañana mantuvo en duda la “foto de la unidad”. Tras una serie de diálogos con su equipo, optó por asistir al comando de Kast.
Diseño de segunda vuelta. Hace un mes, Kast y su círculo de hierro acordaron designar al exconvencional Martín Arrau como jefe de campaña para el balotaje. El ingeniero civil UC, quien estuvo a cargo de la campaña republicana para el segundo proceso constituyente, trabajará codo a codo con Alejandro Irarrázaval, quien coordina los equipos y organiza el despliegue territorial.
- Arrau tiene un diseño detallado de la estrategia de campaña para los próximos 28 días, elaborado junto al candidato, el timonel Arturo Squella y el estratega Cristián Valenzuela. El esquema contempla incorporar a figuras de Chile Vamos y del Partido Nacional Libertario, propuestas por las colectividades, a la nueva etapa.
- Squella ha tenido conversaciones con líderes de RN, la UDI, Evópoli y el partido de Johannes Kaiser, para conformar un comando unitario. Hasta ahora, el diseño contempla un trabajo conjunto e institucional entre las directivas de las tiendas involucradas.
- En paralelo, está previsto que algunos parlamentarios electos cumplan el rol de voceros.
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Lo que se mantiene. Altas fuentes del Partido Republicano sostienen que la idea de “gobierno de emergencia” enfocado en seguridad, crecimiento económico y migración irregular, que Kast ha instalado en su campaña, se mantendrá para la segunda vuelta.
- Esto, pese a posibles cambios que podrían realizarse en el programa que ha sido coordinado por la abogada Carmen Soza, con la inclusión de técnicos y propuestas de otros comandos.
- Fuentes de Chile Vamos dan como ejemplo lo ocurrido tras las primarias de 2017, donde Sebastián Piñera resultó vencedor. Esa vez, se nombró un enlace a cargo de recibir los planes de otros candidatos y construir nuevos equipos programáticos.
- Ahora, está previsto que sean los partidos los que, en diálogo con Squella, propongan expertos en distintas áreas para ajustar el programa de gobierno.
- En Republicanos existe una buena evaluación del equipo territorial, que encabeza Sebastián Figueroa. Por ende, la idea es mantener la actual estructura logística y territorial, pero que las maquinarias de las otras colectividades se sumen al despliegue ya existente.
