-¿Cree que los hechos violentos del 1 de mayo son un estigma para la comuna?

-Los hechos más violentos ocurrieron en una espacio compartido entre las comunas de Santiago y Estación Central, un barrio eminentemente comercial y que ha tenido dinámicas que han cambiado mucho en los últimos años, sobre todo con mucha violencia, con poder de fuego, con mafias organizadas que son las que hemos estado denunciando desde que llegamos.

Así que más allá de si es un estigma o no, lo que corresponde ahora es ponerse a trabajar fuertemente para poder desbaratar estas bandas y devolverle la tranquilidad a las personas que viven y que transitan por este sector: entre un millón y medio y dos millones de personas todos los días.

-¿Cuáles son las causas de este aumento de la violencia?

-La violencia no tiene un solo origen, un solo motivo, se debe a muchos factores, pero sin duda el poder de fuego y la cantidad de armas que hay en la calle, que circula día a día, ha hecho que los delitos de alta connotación y de mayor violencia, se den en la comuna. Anteriormente, años atrás, siempre ha existido el carterazo, el robo por sorpresa, pero ahora vemos que las bandas tienen poder de fuego y disparan. La violencia ha aumentado principalmente por el poder de fuego que tienen muchas bandas.

-La periodista Francisca Sandoval quedó herida de extrema gravedad el 1 de mayo. ¿Ha ido a verla, se ha contactado con su familia?

-La verdad es que no la hemos ido a ver. Pensamos que es un espacio de intimidad. Le mandamos públicamente fuerza a su familia, pero creemos que tienen que vivir este proceso en el marco de la intimidad como familia, que es un proceso bastante doloroso.

-La familia Sandoval criticó a la fiscalía y al ministerio del Interior por no pedir presión preventiva para imputados de haberla baleado.

-Provoca frustración de parte de todos los involucrados. Y porque hay harto trabajo detrás de la detención. Pero es resorte de la fiscalía y ellos tendrán que explicarlo. No sé si hubo un error. Estuvimos todo el domingo trabajando, entregando información desde la 21 Comisaría a inteligencia de Carabineros para lograr detener a estas dos personas. Las grabamos a través de nuestras cámaras de monitoreo: tenemos cámaras justo en calle Exposición en la vereda poniente. La vereda oriente es Santiago y desde allí efectuaron los disparos. Por eso se fueron a las 3ª Comisaría y no a la 21.

 

-Daniel Jadue culpó a Carabineros por la excesiva violencia del 1 de mayo. ¿Cuál es su visión?

-La visión que tenemos sobre el trabajo de Carabineros es que por lo menos en nuestro municipio ha sido siempre de poder acompañarnos y ayudarnos en las tareas de resguardo del orden y la seguridad de las personas. La comuna creció mucho y esto no vino acompañado del aumento de carabineros. Ahora recibimos con alegría pero con mesura el aumento de dotación policial. Esperamos que sea un buen comienzo para que paulatinamente se vaya aumentando la dotación de nuestra comuna, cuya situación no es comparable a ninguna otra realidad de la RM.

Con Carabineros hemos realizado copamientos en la plaza Argentina, que lograron desplazar y sacar el comercio de este sector y actualmente está despejado.

-Estación Central ha tenido un crecimiento demográfico explosivo, según proyecciones oficiales, desde 2017 pasó de 147 mil a más de 220 mil habitantes.

-Es indudable que la comuna ha cambiado mucho en los últimos cinco años, a partir de un crecimiento que ninguna otra comuna ha tenido en la región Metropolitana ni en el país. Creció cerca de un 40% su cantidad de habitantes, muchos de ellos migrantes, por lo tanto esto no vino acompañado de un proceso de equipamiento comunal.

Aún así Estación Central sigue en algunos sectores conservando la vida de barrio. Es una comuna muy conectada con la posibilidad de desplazarse rápidamente hacia cualquier sector.

 

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-¿Este cambio poblacional cómo lo enfrentan?

-Lo que estamos haciendo ahora es trabajar para aumentar rápidamente la cantidad de servicios comunales y poder compensar de alguna manera el daño que se ha hecho a la comuna a partir del crecimiento desproporcionado, desregulado y sin ningún tipo de planificación que se dio sobre todo con las edificaciones en altura, lo que denominamos el crecimiento vertical que hizo que parte de nuestra comuna se transformara en una zona de sacrificio urbano.

-Uno de los problemas es el aumento de comercio ilegal. ¿Funcionan mafias?

-Sin duda que el comercio ilegal es caldo de cultivo para que funcionen las mafias. Hay mafias que se dedican a este tipo de ilícitos: tienen una cadena bien organizada de suministro, de guardias, también operan con el trabajo precarizado de migrantes, que no tienen acceso a poder realizar otro tipo de trabajo, ya que no tienen su documentación al día. Los utilizan para poder distribuir sus mercancías en estos sectores. Sin duda tienen un funcionamiento organizado, un mecanismo criminal articulado.

-¿De qué manera ha impactado la inmigración a la comuna?

-La migración tiene efectos positivos y negativos también. Al ser una migración descontrolada, muchas de las personas migrantes no tienen acceso a trabajos formales, y esto hace que se deban dedicar muchas veces al comercio irregular, a limpiar vidrios en las calles. Al tener nosotros una concentración vertical tan alta de tantos edificios provoca que sea tal la cantidad de personas que viven en departamentos hacinados, que tienen que hacer su vida en espacios públicos. Esto trae como consecuencia problemas de convivencia con otros vecinos históricos, que ven cómo barrios que en algún momento fueron tranquilos, ahora ya no lo son tanto. Esto claro que acarrea una dificultad de convivencia y tenemos que avanzar hacia políticas que puedan ir mejorando estas situaciones. Pero no las podemos generar solamente desde los municipio, sino que tiene que haber una política central que mire estos temas.

-¿Usted sigue viviendo en Estación Central?

-Yo he vivido toda la vida acá, es la comuna que amo y no tengo ningún interés de irme. Es donde vive mi familia, mis papás, donde están mis amigos, mis amigas. Creo que es una comuna que tiene mucho todavía por entregar y de la que todavía hay mucho por hacer para recuperarla después de tanto tiempo en la que no hubo un crecimiento regulado ni programado. Así que hay heridas profundas que tenemos que sanar.

-¿Cuáles son los grandes déficit del municipio?

-Nuestro principal interés es recuperar la tranquilidad, la seguridad y la vida de barrio en nuestra comuna.

Estamos en proceso de generar nuestro primer plan regulador, que es un instrumento que va a permitir planificar la comuna a una escala distinta, más humana, de manera más sustentable y este proceso lo hacemos en conjunto con la comunidad. También estamos acercando servicios del municipio, a todos los territorios de la comuna, para marcar presencia en barrios donde nunca había llegado el municipio.

Estamos robusteciendo nuestra seguridad pública y nuestro trabajo con Carabineros. Estamos duplicando la flota de vehículos y sacando un número único, para que la gente pueda llamar y lograr un estándar mínimo de seguridad. Los principales desafíos son dotar a la comuna de servicios: jardines infantiles, consultorios y devolverle la seguridad a los barrios.

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