La veloz propagación de la variante ómicron en el mundo planteó un sentido de urgencia a la cumbre de la Unión Europea (UE) del jueves, donde los gobernantes del bloque luchan por presentar un frente unido ante el coronavirus.

Las proyecciones de que la altamente contagiosa variante del covid-19 será dominante en la UE a partir de enero llevaron el tema al tope de la agenda de la cumbre, entre temores de una crisis sanitaria.

La cumbre también abordará otros grandes temas que enfrentan las capitales europeas, en particular el fortalecimiento militar ruso que podría anticipar una invasión de Ucrania.

Ese riesgo dominó un encuentro del miércoles entre gobernares de la UE y sus pares del este europeo, incluyendo el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski.

La agenda se completa con el enfrentamiento con Bielorrusia sobre los flujos migratorios a Europa y el incremento en el precio de la energía, que agravan la inflación.

Todo apunta a una cumbre cargada, la  última antes de que Francia asuma la presidencia rotativa de la UE por seis meses a partir del 1 de enero.

Invierno de ómicron 

Europa se prepara para un invierno dominado por la variante ómicron, y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, indicó el miércoles: "la ciencia nos dice que debemos esperar que ómicron sea ya la nueva variante dominante en Europa a mediados de enero".

El momento es peligroso. Aunque muchos países de la UE están en la vanguardia global con sus tasas de vacunación, otros están rezagados.

Nueve países del bloque tienen tasas de vacunación por debajo de 60%.

Ómicron aparentemente puede evadir los efectos de las vacunas existentes reforzó los esfuerzos de aplicar dosis de refuerzo.

Pero el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC), advirtió el miércoles que las vacunas no son suficiente, dado que las infecciones de ómicron se duplican cada dos días.

"No habrá tiempo de abordar las brechas de vacunación", alertó Andrea Ammon, directora del ECDC.

"Los próximos meses serán difíciles", reconoció la comisaria europea de Salud, Stella Kyriakides.

Más coordinación 

Datos iniciales de Sudáfrica, donde ómicron es dominante, indican que la variante produce síntomas más leves que la variante delta, pero los modelos matemáticos sugieren que la inefectividad de las vacunas podría permitir la saturación de hospitales.

El borrador de las conclusiones de la cumbre, vista por AFP, indica que "la aplicación de vacunas a todos y las dosis de refuerzo son cruciales", al tiempo que mantiene la coordinación en la UE.

Sin embargo, el frente unido se ha debilitado visiblemente.

Italia, Irlanda, Portugal y Grecia endurecieron las restricciones de ingreso desde la UE, al exigir pruebas PCR incluso para visitantes vacunados.

Esas medidas parecen socavar las  reglas de un certificado europeo de covid que desde julio ha asegurado la movilización dentro de la UE sin necesidad de cuarentena o pruebas PCR.

Los países de la UE pueden suspender algunas de las reglas durante emergencias sanitarias, pero primero deben notificar a Bruselas con 48 horas de anticipación.

Un portavoz de la Comisión Europea dijo que Italia no lo hizo.

Un funcionario de la UE dijo a periodistas en condición de anonimato que "en algunos momentos se debe tomar decisiones rápidamente" para enfrenar una emergencia.

"Italia tiene una alta taza de vacunación. Yo puedo entender por qué los países miembros toman medidas fuertes para combatir el virus", agregó.

Señaló que la vacuna BioNTech/Pfizer es la más popular en la UE pero que se necesitan vacunas específicas contra ómicron. "Mi impresión es que solo estarán disponibles en el segundo trimestre", entre abril y junio del próximo año.

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