Rusia inscribió y presentó el pasado fin de semana el Afivavir como el primer fármaco para tratar el COVID-19 y aseguró que están listos para poder exportar el medicamento a diversos lugares del mundo, incluido Latinoamérica, foco actual del coronavirus en el mundo occidental.
Según informaron las autoridades locales, se logró cubrir la demanda interna del medicamento en el país, que ha mostrado satisfactorios resultados en las pruebas clínicas, según informaron desde el Ministerio de Sanidad de Rusia.
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"A medida que vayamos cubriendo la demanda interna, creemos posible exportarlo al exterior. Ya hemos recibido muchas solicitudes de países de Oriente Medio y América Latina", dijo el presidente del Fondo de Inversiones Directas de Rusia Kiril Dmitriev.
La autoridad anunció que el 11 de junio comenzará el envío del medicamento, elaborado a base de un antiviral japonés, a los diferentes centros hospitalarios donde se está tratando el coronavirus.
Según explicaron los desarrolladores del medicamentos, las pruebas clínicas han mostrado una eficiencia del fármaco en el 90 por ciento de los casos, aunque está “categóricamente contraindicado” para mujeres embarazadas y personas que estén en proceso de tener hijos en el corto tiempo.
"El Afivavir no solo es el primer fármaco antiviral registrado en Rusia para tratar el coronavirus, sino quizás la medicina más prometedora para curar del COVID-19 a nivel mundial", agregó Dmítriev en un comunicado del gobierno ruso.
Rusia aclaró que el fármaco no será comercializado, sino que sólo será suministrado en los centros médicos.