La policía tailandesa anunció el arresto de un hombre de 28 años de nacionalidad extranjera bajo sospecha de haber participado en el ataque con bomba que mató a 20 personas cerca de un santuario en Bangkok hace casi dos semanas.

En el operativo, efectuado este sábado, fue allanado un apartamento en el norte de la capital tailandesa y se descubrió lo que podría ser equipo para fabricar bombas, confirmó el subjefe de la policía nacional tailandesa, general Chaktip Chaijinda.

Las autoridades han estado buscando a un principal sospechoso, descrito como un exranjero, que fue grabado entrando al santuario Erawan con una mochila negra y, luego, saliendo sin esta.

El general Chaktip dijo, sin embargo, que "aún no está claro" si el hombre arrestado es el mismo que fue visto en las imágenes de la cámara de seguridad.

"Encontramos decenas de pasaportes en su cuarto. Tenemos que verificar a que nacionalidades pertenecen".

"Peor atentado"

El ataque ocurrió el 17 de agosto en un sitio cerca del santuario Erawan, en el distrito central capitalino Chidlom, cerca de un hotel de lujo en una zona muy frecuentada por turistas.

El santuario le rinde culto al dios hindú Brahma pero es también visitado por miles de budistas todos los días. También se encuentran importantes centros comerciales en el vecindario.

El primer ministro de Tailandia, Prayuth Chan-o-cha, lo describió como el peor atentado jamás perpetrado contra el país.

La intersección Ratchaprasong, donde se dio la explosión, ha sido escenario de manifestaciones políticas en años recientes.

Previamente, la policía había dicho que el ataque habría sido planificado con un mes de anticipación con la participación de por lo menos 10 personas.

Añadió, sin embargo, que una conexión con el terrorismo internacional era poco probable.

El corresponsal de la BBC señala que los ataques con bomba son extremadamente inusuales en Bangkok.

No obstante, Bangkok ha pasado por una década de enfrentamientos, algunas veces violentos, entre grupos políticos rivales.

El ejército tomó el poder en mayo del año pasado, derrocando el gobierno electo, tras meses de disturbios.

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