El gobierno de Estados Unidos anunció el lunes el fin del Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés) para El Salvador.

El TPS otorga la residencia legal temporal a unos 200.000 salvadoreños en Estados Unidos, según un reporte de noviembre del Servicio de Investigación del Congreso de ese país.

El programa humanitario terminará el 9 de septiembre de 2019. Es decir, los salvadoreños tienen hasta esa fecha para abandonar Estados Unidos o conseguir alguna otra forma de residencia legal en el país norteamericano.

El Salvador fue incluido en el listado de países amparados por el TPS después de una serie de terremotos que afectaron al país centroamericano en 2001.

El Departamento de Seguridad Nacional estadounidense (DHS, por sus siglas en inglés) confirmó la noticia el lunes en la mañana.

"Después de considerar cuidadosamente la información de una amplia variedad de fuentes, la secretaria Kirsten M. Nielsen decidió poner fin al TPS para El Salvador. Determinó retrasar el fin por 18 meses. El TPS terminará el 9 de septiembre de 2019", señaló un tuit del DHS.

El gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, ya había anunciado el fin de las protecciones del TPS para haitianos y nicaragüenses.

Conflictos o desastres

El TPS es un programa migratorio creado en 1990 con el que EE.UU. concede permisos de forma extraordinaria a los ciudadanos de países afectados por conflictos bélicos o desastres naturales.

El gobierno de Estados Unidos decide si renovar el TPS para los diferentes países en un lapso de seis a 18 meses.

Con casi 200.000 inmigrantes en Estados Unidos, El Salvador representa el grupo más numeroso de beneficiarios del TPS.

El 5 de enero de 2019 también se acabará este programa para unos 5.300 nicaragüenses y en 2018, para más de 58.000 haitianos, según anunció el DHS en 2017.

En mayo de 2019 se acabará el TPS para sudaneses del sur.

Alrededor de 300.000 inmigrantes de diez países han recibido este estatus legal temporal desde que fue firmado como una ley por el expresidente George H. W. Bush.

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