Un perro de raza Chihuahua se encuentra en juicio en Inglaterra por morder a una vendedora de cosméticos. Si es declarado culpable, el animal podría ser sacrificado.
Buddy, como fue bautizado el canino, atacó a una mujer que se dedicaba a comercializar productos de una conocida empresa de cosméticos. La mujer, identificada como Louise Ellif, se encontraba repartiendo catálogos de la marca en un barrio de la ciudad de Crook.
El dueño del animal, Ash Routledge, de 30 años, enfrenta hasta seis meses de cárcel y, lo que sería aún más grave, la obligación de acabar con la vida de su mascota.
Como recoge The Sun, Routledge afirmó que "nunca esperé que (la situación) llegara tan lejos. Es simplemente ridículo".
“Lo que pasó fue un completo accidente. El dinero de los contribuyentes se desperdiciará en un caso que podríamos haber resuelto entre nosotros", añadió el hombre.
"En realidad no lo vi, pero tomé la palabra de la señora Avon y le dije que lo sentía. Hay problemas mucho más grandes en el mundo que un pequeño Chihuahua", agregó el dueño de Buddy.
La fotografía de las heridas publicadas por el tabloide inglés muestran los dientes del pequeño animal marcados en la pierna de la mujer de 49 años.