El Gobierno de Chile lanzó este lunes (10.01.2022) un plan piloto para agilizar la localización de los cientos de víctimas de adopciones ilegales cometidas durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) que se encuentran tanto en territorio nacional como en el extranjero para favorecer el reencuentro con sus familias.

"Estamos avanzando en colaborar con aquellas personas cuyos hijos fueron adoptados en forma irregular o fueron inscritos de manera falsa, quitándoselos a sus madres y a sus padres, haciendo actos verdaderamente vejatorios de la dignidad humana", dijo el ministro de Justicia, Hernán Larraín.

La estrategia busca favorecer la reunificación de las familias y contribuir a esclarecer las irregularidades en alrededor de 700 adopciones ilegales que investiga el Poder Judicial, según la fuente. La iniciativa, que estará a prueba durante un año, ofrecerá acompañamiento a las familias, facilitará el acceso a toma de muestras de ADN de las presuntas víctimas -aunque se encuentren en el extranjero- y tratará de colaborar con procesos informáticos y económicos.

Este plan se suma a la investigación judicial que se abrió en 2018 para indagar una supuesta red de adopciones ilegales de niñas y niños cuyas madres estaban en situación de vulnerabilidad durante la dictadura de Pinochet. Las primeras denuncias salieron a la luz en 2014 y a la fecha se investigan más de 700 casos, aunque el magistrado Mario Carroza -que encabezó el proceso- aseguró que el número de víctimas bajo escrutinio podría llegar a 20.000.

También, participará en el plan piloto el Servicio Médico Legal que tendrá la misión de desarrollar "un banco de huellas genéticas de personas adoptadas en forma irregular que permita el proceso de filiación", señaló el director de la entidad, Gabriel Zamora.

Sin embargo, la ONG Hijos y Madres del Silencio afirmó que el plan no es suficiente y reclamó "el otorgamiento de mayores recursos al Poder Judicial para el avance de las causas", así como la creación una comisión para poder cuantificar las víctimas de adopciones ilegales.

El pasado octubre, Suecia comenzó una investigación sobre las adopciones irregulares, en respuesta a las demandas de personas adoptadas chilenas en este país que lograron establecer una conexión con sus padres biológicos a través de pruebas de ADN. Según el diario sueco Dagens Nyheter, cerca de dos millares de niñas y niños chilenos fueron adoptados por personas suecas entre 1974 y 1990, dentro de una campaña para tratar de mejorar las relaciones entre ambos países y en la que jugaron un papel relevante el Centro de Adopción Sueco y grupos de extrema derecha de Suecia afines a Pinochet.

Augusto Pinochet tomó el poder en 1973 tras derrocar al socialista Salvador Allende en un golpe de Estado e instauró un régimen que se extendió durante 17 años, dejando más de 3.000 personas opositoras ejecutadas o desaparecidas y alrededor de 40.000 torturadas.

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