Un jurado declaró el viernes culpable de dos asesinatos y cinco intentos de homicidio a un canadiense que atacó durante una noche de Halloween a transeúntes en la ciudad de Quebec con una espada samurái, vestido de un disfraz medieval.
Carl Girouard, de 26 años, infundió el terror durante varias horas en la capital de esta provincia francófona de Canadá que celebraba Halloween el 31 de octubre de 2020, al parecer atacando víctimas al azar.
Dos personas fueron asesinadas, incluyendo una mujer cuya garganta fue cortada con una catana, un sable curvado usado por los guerreros samuráis en el Japón. Cinco resultaron heridas.
Girouard fue arrestado sin oponer resistencia.
"Estamos muy felices por las familias de las víctimas que ahora serán capaces de dar vuelta a la página y, esperamos, sanen sus heridas", dijo el fiscal Francois Godin afuera del tribunal.
"No traerá de vuelta a nuestros seres amados, pero la sociedad quedará protegida", comentó la cuñada de una de las víctimas, Suzanne Clermont.
Girouard admitió los asesinatos en la corte pero culpó a un trastorno mental de sus acciones, y se declaró no responsable penalmente.
La lectura de la sentencia de Girouard está prevista para el 10 de junio. Su abogado dijo que tiene previsto apelar el veredicto.