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AFP

Los españoles empezaron a votar este domingo en unas elecciones regionales y municipales que ponen a prueba a las nuevas formaciones políticas, como Podemos, inspirada en el movimiento de los indignados, frente a las fuerzas tradicionales.

"La nueva y la vieja política miden sus fuerzas en las urnas", titula este domingo el diario El País, que no duda en afirmar que se trata de "las elecciones más inciertas" desde la vuelta a la democracia en España tras la muerte de Franco en 1975.

La respuesta podría estar en el más de 30% de votantes que todavía no han decidido su sufragio, en unos comicios que tradicionalmente son un reflejo de lo ocurrido posteriormente en las generales, previstas paras finales de año.

Desde las 9:00 locales (7:00 GMT) y hasta las 20:00 (18:00 GMT), más de 35 millones de votantes están llamados a las urnas, de los que algo más de un 1,5 millones son jóvenes que votan por primera vez y cuyo sufragio podría tener una gran importancia.

Treintañeros  

Este voto joven es la principal baza que quieren jugar las nuevas formaciones como la antiliberal Podemos, aliada del partido griego Syriza, o su opuesto de centro-derecha, Ciudadanos.

Estas formaciones están lideradas respectivamente por el profesor universitario Pablo Iglesias, y el abogado Albert Rivera, dos treintañeros, que amenazan la alternancia en el poder que han mantenido desde 1982 el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y el gobernante Partido Popular (PP, derecha).

"Los siete años de crisis y sus graves secuelas en el tejido social, los cinco millones de parados, el descontento ciudadano con el funcionamiento de las instituciones y los escándalos de corrupción" han erosionado a los dos grandes partidos tradicionales españoles e impulsado las dos nuevas formaciones, recuerda El Mundo.

Estas elecciones miden "la voluntad de cambio de los españoles", añade el diario.

Los españoles renovarán 13 de los 17 parlamentos regionales, en un país muy descentralizado donde las regiones tienen importantes competencias especialmente en materia de educación y de sanidad. La derecha domina 13 de estas comunidades autonómicas.

Además, también elegirán a 8.122 alcaldes, incluidos los de Madrid, Barcelona y Valencia, las tres mayores ciudades españolas, dirigidas las dos primeras por el PP y la tercera por los nacionalistas catalanes.

Recuperación vs crisis 

Las elecciones llegan tras una crisis cuyas consecuencias todavía no han borrado el hecho de haber vuelto a la senda del crecimiento en 2014 (+1,4%).

Miles de jóvenes han emigrado para huir del desempleo que afecta a la mitad de ellos y a un 23,7% de la población activa, a la vez que los escándalos de corrupción - en medio de una dura política de austeridad -, han contribuido a aumentar el malestar ciudadano.

De ahí las dificultades del PP para convencer a los ciudadanos de que ha sido el artífice de la recuperación económica y de los peligros de "experimentos" como Ciudadanos, acusado de aliarse con el PSOE, o de Podemos, presentada como una formación "bolchevique" que destruirá las "libertades".

"Salga usted a la calle, salga del jet privado, salga de su barrio de lujo y mire la realidad de este país Sr. Rajoy", lanzó Pablo Iglesias el viernes en su último mitin de campaña, prometiendo defender el derecho a la vivienda, la sanidad, la educación y la lucha contra la corrupción.

"Esta campaña por un cambio político es histórica", dijo Rivera, que promete un "cambio sensato".

Según los últimos sondeos, los dos grandes partidos estarán obligados a pactar en 12 regiones para gobernar.

El escenario es idéntico para las municipales, donde las plataformas ciudadanas inspiradas por el movimiento de los 'indignados' son muy numerosas, con dos grandes luchas en Madrid y Barcelona.

La primera opone al "animal político" del PP, la ex ministra Esperanza Aguirre, de 62 años, que promete acabar con el "afán recaudatorio"de multas del ayuntamiento, contra Manuela Carmena, antigua jueza de 71 años.  

Militante comunista opuesta a Franco en su juventud, "Manuela" es la candidata de una plataforma que reúne a Podemos con otras formaciones de izquierdas.

En Barcelona, Ada Colau, de 41 años, heroína de los 'indignados', fundadora de una plataforma que lucha contra los desahucios, podría arrebatar la plaza al alcalde Xavier Trias, de 68 años, un nacionalista conservador.

Los resultados electorales se esperan a partir de las 22:30 (20:30 GMT).

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