La militante ecologista sueca Greta Thunberg fue inculpada por alteración del orden público, tras ser detenida el martes durante una protesta paralela a una conferencia de la industria del petróleo y del gas en Londres, anunció este miércoles la policía.

Las manifestaciones contra la industria de los hidrocarburos continuaron este miércoles en la capital británica, delante del hotel donde se desarrolla la conferencia Energy Intelligence Forum.

La joven, de 20 años, fue puesta en libertad bajo supervisión judicial y deberá comparecer ante un tribunal de Londres el 15 de noviembre, precisa el comunicado policial.

La activista por la defensa del medioambiente fue una de las 26 personas inculpadas por la manifestación.

Greta Thunberg será procesada por no haber acatado la orden de la policía de no bloquear la calle donde tuvo lugar esta acción de protesta contra el foro, en un hotel del elegante distrito de Mayfair, que reúne a los líderes de las principales compañías de hidrocarburos.

La militante ecologista se prodiga en este tipo de acciones de bloqueo. Hace pocos días recibió una multa por parte de las autoridades suecas por un incidente parecido en Malmö.

Y en enero, la policía la sacó a la fuerza de una manifestación contra el uso del carbón en Alemania.

Protestas del miércoles

El martes por la mañana, antes de su detención, Greta Thunberg había criticado que "detrás de estas puertas cerradas (...), políticos sin talla concluyen acuerdos y compromisos con gente del lobby del destructivo sector de los combustibles fósiles".

El miércoles, las manifestaciones continuaron con un centenar de personas recibiendo a los participantes a la conferencia con gritos "dan vergüenza" y mostrando pancartas en las que se podía leer "Paren Rosebank", un campo petrolífero  controvertido en el Mar del Norte, que contó el mes pasado con la autorización del gobierno británico para su explotación.

Militantes del grupo ecologista Extinction Rebellion se manifestaron también este miércoles en el corazón de la City, el barrio económico de Londres, frente a las oficinas de las aseguradoras del mercado del sector, Lloyds, según una nota de prensa.

Una veintena de manifestantes de Fossil Free London, otro grupo ecologista, organizó una sentada para bloquear la entrada a la sede de TotalEnergies en el distrito comercial de Canary Wharf, encendiendo bengalas amarillas y gritando 'Fuera el dinero del petróleo' o 'Paren Total', entre otros eslóganes.

El CEO de la empresa saudita Aramco, Amin Nasser, reafirmó durante la conferencia su idea de que "nuevas inversiones" en los hidrocarburos son necesarias para contrarrestar el declive de los yacimientos petrolíferos envejecidos.

Por su parte, Wael Sawan, de Shell, defendió que su compañía trata de "garantizar la seguridad energética".

Pero al mismo tiempo, añadió, "queremos participar en la transición energética invirtiendo entre 10.000 y 15.000 millones de dólares en los próximos tres años”.

Sawan habló por videoconferencia, al no haber podido acceder al hotel debido a la manifestación.

Publicidad