Uno de los grandes deseos comunes de la mayoría de las novias es poder ingresar a la iglesia tomadas del brazo de su padre, para así vivir juntos ese especial momento que recordarán toda la vida.

Precisamente, esta era una de las intenciones de Jeni Stepien; sin embargo, su padre Michael murió hace diez años tras haber sido víctima de un robo. 

Lejos de dejarse vencer por esta situación, la joven intentó darle un sentido mucho más emotivo a su matrimonio e invitó al hombre que precisamente recibió el corazón de su padre después de que la familia decidiera donar sus órganos.

"Querido Tom, soy la hija del hombre cuyo corazón está dentro tuyo y me voy a casar el 6 de agosto (...) ¿Me acompañarías hasta el altar?", le hizo saber a través de una carta.

Por supuesto, Tom no dudó en hacer realidad el deseo de la novia aunque primero debió sortear una decisión casi protocolar: preguntarle a su propia hija. "Jeni será la primera persona a quien acompañaré hacia el altar", explicaría el hombre.

Así fue cómo se gestó esta emotiva historia que terminó con el viaje desde Nueva Jersey de Tom y el encuentro con Jeni un día antes de la boda registrada en Swissvale, Pensilvania.

Al momento de la ceremonia, Jeni recibió a Tom con un abrazo y entre llantos buscó sentir el pulso del corazón de su padre. "¿Puedes sentirlo?", le preguntó. La novia de 33 años solamente atinó a asentir.

"Estoy muy emocionada. Toda la familia está acá. Es como que estamos todos acá", sostuvo ante las cámaras de la cadena local KDKA, que cubrió el conmovedor encuentro.

"Es como tener a mi padre aquí y mejor porque podemos compartir esta historia con la gente y que la gente vea que donar órganos es importante", dijo Jeni.

 "Estoy tan agradecida de que mi padre pudo estar aquí con nosotros hoy en espíritu y una parte de su cuerpo también. Fue realmente muy especial para nosotros", dijo más tarde.

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