El 8 de mayo de 2025, la Iglesia Católica vivió un momento histórico con la elección del cardenal Robert Francis Prevost como nuevo Papa.
El ahora papa León XIV es el primer pontífice con doble nacionalidad estadounidense y peruana, y cuenta con una destacada trayectoria en la Orden de San Agustín, donde se desempeñó como prior general durante 12 años.
La elección del nombre “León XIV” y su lema papal reflejan no solo su herencia espiritual agustiniana, sino también su visión pastoral centrada en la unidad de los fieles. Su lema, "In illo uno unum" ("En el único somos uno"), está inspirado en un comentario de San Agustín al Salmo 127, y resalta el compromiso del nuevo Papa con una Iglesia unida, alejada de divisiones y enfocada en la espiritualidad compartida.
Tras su elección, el Vaticano reveló el nuevo escudo papal de León XIV, cargado de simbolismo agustiniano y cristiano. En el centro destaca un corazón atravesado por una flecha sobre un libro abierto, emblema característico de la Orden de San Agustín. Este símbolo remite al amor por la sabiduría y la verdad, pilares del pensamiento agustiniano.
En el lado izquierdo del escudo y sobre un fondo azul se evidencia un lirio blanco, símbolo tradicional que se asocia con la Virgen María. Finalmente, el lema "In illo uno unum" aparece en una banda blanca, reforzando el llamado a la unidad en Cristo como eje central de su misión pastoral.
¿Cuál fue el escudo que usó el papa Francisco?
En el caso del papa Francisco, el argentino decidió mantener el escudo que había elegido desde su consagración episcopal, caracterizado por una notable simplicidad. En él, sobre un fondo azul, se encuentran los símbolos de la dignidad pontificia, inspirados en los que usó su predecesor, Benedicto XVI: una mitra entre llaves de oro y plata entrelazadas por un cordón rojo.
En la parte superior destaca el emblema de la Compañía de Jesús, el sol radiante con las letras IHS, acompañado de una cruz sobre la "h" y tres clavos negros en la punta. En la parte inferior del escudo se encuentran una estrella, símbolo de la Virgen María, y una flor de nardo, que representa a san José, patrón de la Iglesia universal.
El lema de Francisco, "Miserando atque eligendo", traducido como “Te veo con misericordia y te llamo”, tuvo un significado muy personal para él, ya que remite a una experiencia espiritual que vivió en su juventud.
En la fiesta de san Mateo de 1953, Jorge Bergoglio, a los 17 años, sintió una profunda llamada de Dios a la vida religiosa después de una confesión, experimentando la misericordia divina de manera decisiva. Al ser nombrado obispo, eligió este lema como expresión de su consagración a Dios y su camino espiritual, un gesto que repitió en su escudo pontificio.