Un juez sentenció a un año de prisión a un joven que estuvo involucrado en una carrera callejera de autos que terminó con dos hombres muertos.

Sin embargo, además de eso, Carlos Hernández de 19 años tendrá que pasar un tiempo en la morge de Los Angeles mirando cadáveres de personas que mueren en accidentes ocasionados por conductores imprudentes, según consigna Univisión

Se trata de una medida que buscar crear consciencia  hacia una manera de conducir más prudente.

Hernández participó en una carrera de autos sobre la Pacific Coast Highway, en Wilmington, junto a la joven Elexis García de 18 años. La mujer iba acompaña de su hermanos y de otros dos amigos.

En medio de la carrera, Hernández cambió de carril sin aviso previo y provocó que García perdiera control de su vehículo.

El accidente terminó con la conductora muerta y su hermano Elías. Los otros dos pasajeros resultados heridos. 

Publicidad