Bloomberg

May argumentará que se necesita nueva tecnología para monitorear esas transacciones, ya que pueden aportar pistas sobre los próximos ataques. Dirá que partes del sistema financiero internacional actúan como "espacios seguros" para el Estado Islámico y grupos afines, y sugerirá que la policía y los bancos trabajen en conjunto para detectar actividades sospechosas.

"Sabemos que la amenaza terrorista está evolucionando", dijo May en un comunicado emitido por su oficina. "Debemos adelantarnos a la metodología terrorista a medida que se desarrolla para atacar a otros objetivos vulnerables y el aumento en los ataques inspirados. Esto incluye tomar medidas contra ambientes permisivos para el financiamiento del terrorismo y monitorear la dispersión de combatientes extranjeros".

El enfoque de May en el terrorismo en parte refleja la vulnerabilidad de Gran Bretaña. El país ha sufrido tres ataques de inspiración islámica este año: en el Parlamento, en un concierto pop de Manchester y en London Bridge. Pero también refleja su propia debilidad, tras haber perdido su mayoría parlamentaria en las elecciones generales del mes pasado.

La reunión del G-20, organizada por la canciller alemana Angela Merkel, comienza el viernes por la noche en medio de una alta seguridad, ya que la segunda ciudad más grande de Alemania se prepara para protestas con la llegada de líderes mundiales, Donald Trump y el presidente de Rusia Vladimir Putin.

Publicidad