Donald Trump se afianzó este lunes como el gran favorito de los republicanos para las elecciones presidenciales de noviembre en Estados Unidos con una victoria fulgurante en las primarias de Iowa, anunciada apenas media hora después del comienzo de la votación.

El magnate de 77 años, sobre el que pesan cuatro inculpaciones penales, aventaja por mucho a sus principales rivales, Ron DeSantis y Nikki Haley, según resultados casi definitivos.

Trump da así un paso más hacia un probable duelo con el presidente demócrata saliente Joe Biden.

"Creo que ha llegado el momento de que todos, de que nuestro país se una (...). Ya sean republicanos, demócratas, liberales o conservadores", afirmó el expresidente ante sus simpatizantes congregados en medio de un ambiente festivo en Des Moines, capital de este estado del medio-oeste del país.

Acto seguido resumió su programa electoral. Prometió perforar más pozos petroleros y "cerrar la frontera" con México.

La inmigración es uno de los temas que más preocupa a los republicanos y uno de los predilectos de Trump, quien afirma que los migrantes "envenenan la sangre" del país y amenaza con llevar a cabo "la mayor operación interna de expulsión" si regresa a la Casa Blanca.

Donald Trump, claro favorito

En un mensaje en la red social X, Biden reconoció que la victoria en Iowa convierte a Trump en el "claro favorito" de los republicanos "en este momento".

Por su lado, el gobernador de Florida Ron DeSantis, un conservador con posiciones duras sobre la inmigración o el aborto, quedó en el codiciado segundo lugar con un 21% de los votos. 

DeSantis apostó todo por Iowa, recorriendo en los últimos meses cada uno de los 99 condados. 

Saboreó su buen resultado con sus partidarios, a quienes dio las gracias por su apoyo cuando "todos estaban en contra". Los medios de comunicación "escribieron nuestro obituario hace unos meses", les dijo. 

La exembajadora ante la ONU Nikki Haley, la única mujer en la carrera y muy apreciada por los círculos empresariales, quedó tercera con un 19%, pero no se consideró derrotada y pronosticó que le iría mejor en otras primarias.

En cuarto lugar se situó Vivek Ramaswamy con aproximadamente el 7%, pero él anunció en cambio que tiraba la toalla y llamó a votar por Donald Trump.

A pesar de una nevada, los votantes se reunieron en escuelas, bibliotecas y parques de bomberos de Iowa para el "caucus" o asamblea electoral. 

Después de una oración y el tradicional juramento de lealtad a la bandera estadounidense, los representantes de los candidatos pronunciaron un discurso y después los participantes plasmaron en una hoja de papel su elección.

Allan Latcham, un cardiólogo de 62 años, admite haberse "sorprendido" por la rapidez con la que se anunciaron los resultados. 

"Es una gran noche", se alegró, desafiando las gélidas temperaturas de -30 grados Celsius. Él quiere que Trump "regrese a Washington" porque "va a ayudar con la frontera" con México.

Publicidad