Este lunes 23 de septiembre se conmemora el Día Internacional Contra la Explotación Sexual y el Tráfico de Mujeres, Niños y Niñas y las cifras asociadas a este tipo delito han ido en aumento en nuestro país.

Según datos entregados desde la Fiscalía a T13.cl, las denuncias por explotación sexual infantil en Chile incrementaron en los últimos dos años: En 2017 se reportaron 171 delitos de este tipo, mientras que en 2018 el número llegó a 203 casos, ya sea por promover o facilitar la prostitución de menores, o por la obtención de servicios sexuales de menores.

En tanto, de enero de 2019 hasta la fecha, los casos por este tipo de delitos suman 95 denuncias. 

Las causas del aumento 

Este aumento tiene diversas causas, entre ellas, la falta de normativas que protejan a los menores en el país, según aseguró Francis Valverde, directora ejecutiva de la Asociación Chilena Pro Naciones Unidas (ACHNU), organización que resguarda los derechos de los niños y jóvenes.

“Las razones pueden ser el aumento de la pobreza, la falta de oportunidades y llanamente el incremento de los explotadores sexuales infantiles, que primero seducen y luego explotan. Además, esto responde a un tema estructural, pues los niños y niñas no cuentan en Chile con una Ley de Protección Integral de Derechos, o de garantías que les aseguren protección y provenga vulneraciones", afirmó la experta a este medio.

 Y Valverde agregó: "A 30 años de la Convención sobre los Derechos del Niño, Chile es el único país de América Latina que no cuenta con una Ley de Protección".

Cifras de denuncias por explotación sexual infantil en Chile

Año

Delitos ingresados

2013

149

2014

160

2015

123

2016

121

2017

171

2018

203

2019 (hasta la fecha)

95

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

A comienzo de los 90', Chile fue uno de los primeros países en firmar la Convención sobre los Derechos del Niño, instrumento que obliga a los Estados a adecuar las leyes sobre los menores de edad respetando los principios en esta convención.

En este contexto, la especialista precisó que lo que existe en nuestro país son "políticas parche" de protección a la infancia gestionadas por el Ministerio de Desarrollo Social y el Servicio Nacional de Menores (Sename).  

"Las políticas públicas parche son todas las que están bajo el alero del Sename y del Ministerio de Desarrollo Social. Todos los programas de protección que tiene el Sename supuestamente están bajo -o debieran estarlo- el mandato sobre la Convención sobre los Derechos del Niño, pero al no existir la Ley de Protección Integral en realidad no se cumple ninguna de las condiciones exigidas por la Convención sobre los Derechos del Niño", indicó. 

Los números en el mundo 

Según cifras de la OMS dadas a conocer en el "Informe de las Naciones Unidas sobre la violencia contra los niños" en 2002, millones son los infantes que sufren violencia sexual a nivel mundial.

"En 2002, la OMS estimó que 150 millones de niñas y 73 millones de niños menores de 18 años experimentaron relaciones sexuales forzadas u otras formas de violencia sexual con contacto físico", señala el texto. 

Por qué nunca se debe hablar de "prostitución" infantil 

Valverde afirmó que a la explotación sexual infantil no se le puede llamar prostitución, pues esta última se ejerce de manera voluntaria y no como una obligación.

Según define un artículo publicado por la Escuela de Medicina de Pontificia Universidad de Católica de Chile, la explotación sexual comercial en niños, niñas y adolecentes es una forma de esclavitud.

"La explotación sexual comercial (ESC) en niños, niñas y adolescentes es una forma de abuso sexual. Se considera una moderna forma de esclavitud y es una de las expresiones más graves de vulneración de derechos de los niños y adolescentes", indica el documento. 

La prostitución, según la especialista, es una opción que toman las personas adultas por distintas circunstancias de la vida, decisión que no pueden tomar los niños o niñas libremente.

"Jamás en el caso de niños y niñas se puede plantear que ellos y ellas se están prostituyéndose como si hubiera sido una opción personal. Todo niño o niña que está en explotación sexual está siendo obligado por un adulto o varios. En general están impedidos a tomar decisiones propias", concluyó la experta.

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