Luego de que el viernes pasado el Ministerio de Educación confirmara el cierre de la Universidad Arcis, académicos, estudiantes y funcionarios del plantel rechazaron la medida anunciada por Alejandra Contreras, jefa de la División de Educación Superior.

"El Ministerio de Educación, tomó la decisión de cierre del plantel justificándola en la crisis financiera, que lejos de ser resuelta fue agravada bajo la gestión del Administrador Provisional", acusaron a través de un comunicado. 

Reconociendo que la universidad se encontraba en una "delicada situación económica", los firmantes denunciaron que tras 20 meses de intervención de Patricio Velasco como administrador provisional designado por el ministerio, la recuperación de la normalidad financiera y académica de la institución no fue alcanzada.

Esta situación, según el escrito, se fundamenta en "la deficiente y negligente" gestión de Patricio Velasco, quien "incumplió la Ley 20.800", lo que fue complementado por una "indolente falta de supervisión del Ministerio de Educación". 

"ARCIS fue intervenida por un administrador provisional que no ejecutó campañas de admisión para los períodos 2016 y 2017, no gestionó una diversificación de fuentes de ingreso, colocó evidentes trabas para establecer convenios internacionales, realizó contratación de empresas y asesores externos, de su exclusiva confianza, contribuyendo a profundizar el déficit financiero de la institución, devaluó financieramente la venta de los inmuebles -sedes Libertad y Huérfanos- en relación a los precios del mercado, jamás informó a la comunidad sobre los costos asociados a su gestión", detalla el comunicado. 

Como resultado de la no ejecución de un Plan de Resestructuración, la deuda de Arcis aumentó en más de $2.000 millones. Así lo consignaron quienes firmaron la carta. 

La responsabilidad del MINEDUC

Por otro lado, los miembros de la casa de estudios sostuvieron que el Ministerio de Educación, la ex ministra, Adriana Delpiano, Alejandra Contreras y Patricio Velasco, "no pueden soslayar ni sus responsabilidades políticas ni sus negligencias, enmascarando su complicidad política con el cierre de Arcis y con las responsabilidades que intentan encubrir respecto del origen y desarrollo de esta crisis".

"Arcis, sus académicos, funcionarios y estudiantes no son responsables de la desaparición de su proyecto. Todos y cada uno han trabajado desde el compromiso y la convicción con una generosidad que no tiene parangón en la educación superior en Chile", concluye el escrito.

Publicidad