El Juzgado de Garantía de San Felipe formalizó este martes 25 de noviembre a Iván Alfonso Taum Aros, un hombre acusado de utilizar las tarjetas bancarias del piloto fallecido Fernando Tapia, quien perdió la vida el pasado 29 de octubre. El amigo de la víctima habría realizado compras e incluso pagado los gastos de su cumpleaños.
Fue dos semanas después del accidente en el que murió el aviador cuando su familia denunció el uso de su tarjeta de crédito después de su fallecimiento, lo que derivó en la formalización.
Todo comenzó cuando el hijo mayor del piloto recuperó el celular desde los restos del accidente y activó el chip en otro dispositivo. Fue entonces cuando detectaron múltiples movimientos financieros posteriores al fallecimiento.
El regalo al vendedor con el dinero de su amigo muerto
El acusado fue identificado como Iván Alfonso Taum Aros, un supuesto amigo de la víctima. Su defensa sostuvo que la tarjeta habría sido facilitada por Tapia días antes del accidente.
Sin embargo, para la familia del piloto, lo más doloroso es que las transacciones continuaron incluso mientras el cuerpo de Fernando era velado.
Las imágenes reveladas por T13 muestran al imputado comprando en un supermercado a una semana del accidente y realizando pagos en una tienda de zapatillas. Además, habría efectuado giros en cajeros automáticos, usando ese dinero en compras posteriores.
Incluso, el joven que lo atendió, Benjamín Castro, explicó que "cuando él pagó en efectivo fue donde me regaló las zapatillas. Después volvió nuevamente, compró otras zapatillas y ahí fue cuando él pagó con la tarjeta".
Otra vendedora reveló que "a él lo mandaron. Y cuando vino a comprar acá, al tipo se le olvidó la clave de la tarjeta. Y llamó a alguien y le dieron la clave".
En total, se contabilizaron 12 transacciones realizadas desde el mismo día del accidente, por un monto que supera los $3 millones.
En el reporteo también se constató una compra realizada un día antes del accidente: una manguera para la avioneta del propio Tapia, el piloto fallecido.
El imputado quedó con arraigo nacional y firma mensual mientras dure la investigación.
La hermana del piloto fallecido, Soledad Tapia, hizo un llamado a que “no se descarte nada. Yo y mi familia queremos saber si a mi hermano lo mataron o no”.