Un estudio realizado por la Universidad Andrés Bello (Unab) reveló que un grupo de estudiantes de tercero medio de varias comunas de la región Metropolitana, si bien lograron reconocer nombres relevantes de la historia de Chile, no lograron vincularlos con acontecimientos históricos ni sus aportes al país.
El sondeo se aplicó a un grupo de 409 alumnos de tercero medio de colegios de Vitacura, Las Condes, Maipú, Recoleta, La Florida, Puente Alto y Providencia, y si bien lograron reconocer algunos nombres de figuras como José Miguel Carrera o Pedro de Valdivia, no lograron vincularlos con sus respectivos acontecimientos ni sus aportes.
En conversación con El Mercurio, la decana de la Facultad de Educación y Ciencias Sociales de la Unab y quien lideró la investigación, aseguró que el conocimiento de figuras históricas y héroes patrios "en general es muy bajo, incluso de personajes que -por su popularidad- se da por hecho que deberían ser conocidos".
Mencionaron a Cristiano Ronaldo y Lionel Messi:
El sondeo además confunde el concepto de historicidad con fama, ya que los consultados mencionan a futbolistas como Cristiano Ronaldo o Lionel Messi como figuras históricas.
"Tienen poca conciencia de una historia que trascienda los tiempos más recientes", señaló.
Huidobro manifestó su preocupación con los resultados del estudio, señalando que "los personajes de la historia son relevantes para generar empatía con ellos, y a partir de eso lograr una comprensión más compleja del pasado. Si no reconocemos a nuestros antepasados, perdemos parte de la conciencia de quiénes somos en el presente".
En conversación con T13 Digital PM, Cristián Medina, doctor en historia de la Universidad Complutense de Madrid, señala que la situación revela "de manera dramática el descrédito o abandono en los últimos años del desarrollo y cultivo de las humanidades a nivel general, pensando que es una educación que no permite una cuestión práctica, sino que se ha optado por tratar de potenciar distintas disciplinas que tienen algo más tangible, olvidándose que disciplinas de las humanidades -entre ellas la Historia- hacen modelar, cincelar, desarrollar un intelecto, un juicio crítico, conectar al hombre con el tiempo, la temporalidad de su existencia, y eso evidentemente es preocupante y debiera movilizarnos como sociedad".
"Si colocas la historia como una disciplina accesoria, apendicular, optativa, estás renunciando a la formación de tus propios ciudadanos. Finalmente, el ciudadano se educa, se instruya, se modela mentalmente a través del conocimiento histórico, a través de los procesos históricos que lo sitúan espacio-temporalmente, que le desarrollan una posibilidad de comparar procesos, de tener herramientas que lo conforman como ciudadano en una sociedad democrática, que le permiten aceptar las diferencias y tener una comunidad (...) todos los elementos que resguardan el buen vivir del ciudadano, tienen que tener el conocimiento de su pasado histórico", manifestó.