A dos semanas de las reuniones protagonizadas por los 32 obispos chilenos citados hasta Roma por el Papa Francisco por casos de abusos sexuales y encubrimiento en el caso de Fernando Karadima y otros, el vocero de la Conferencia Episcopal aborda el encuentro que terminó con la carta de renuncia de todos los obispos nacionales.  

Ramos relata que las reuniones con el papa fueron de un trato “extremadamente cordial” y que “en ningún minuto sentimos esa frialdad que algunos medios han comentado”.

Según informa el Mercurio en su cuerpo de reportajes, sobre la carta que entregó el Sumo Pontífice a la Conferencia Episcopal con las conclusiones de la visita de Charles Scicluna, Fernando Ramos señala que: “Fue un impacto para todos nosotros porque el mismo documento habla de hacerse cargo de una realidad que ha durado décadas”.

Ramos señala sobre la decisión de los 32 obispos chilenos que: “Ponemos nuestros cargos a disposición, no porque asumamos un juicio penal sobre nosotros mismos, sino para que el Papa, con el conocimiento que tanga y sus orientaciones, con sus colaboradores vean quienes son las personas que realmente pueden seguir cumpliendo esta misión”.

El obispo auxiliar de Santiago agrega que “yo no creo que va a aceptar la renuncia de todos los obispos. De ninguna forma".

En cuanto a la visita de los monseñores Scicluna y Bertomeu a Osorno, el obispo declara que “no vienen como interventores, sino como delegados del papa” Y agrega que “vienen a tener un diálogo, en misión pastoral en un lugar donde hay ciertas fracturas”.

Publicidad