Los funcionarios y funcionarias del Liceo Miguel de Cervantes y Saavedra Básica emitieron un comunicado donde se refirieron al caso del niño de 10 años que sufrió lesiones graves luego de haber resultado “empalado”.
Anteriormente, la madre de la víctima, señaló que los responsables de la agresión eran de nacionalidad venezolana, situación que fue negada por el establecimiento mediante un comunicado y ahora también, por los funcionarios.
“Nos parece relevante aclarar los dichos y la información que a través de redes sociales y distintos medios de comunicación han sido amplia e indiscriminadamente difundidas, faltando a la verdad, sin certeza ni claridad de los hechos”, dice el escrito.
Asimismo, indican que “mucho antes de que este terrible incidente se hiciera público a través de redes sociales y con información distorsionada o abiertamente falsa, la Escuela había realizado las acciones que corresponden en este tipo de situaciones: Activación de protocolos internos hasta la derivación del caso a las instituciones que corresponden”.
Funcionarios apelan a que caso de niño que resultó "empalado" se trató de un accidente
En este sentido, los funcionarios y funcionarias recalcaron que “es importante indicar que, ante la magnitud de este accidente, los antecedentes mostraron que NO hubo intencionalidad, este evento ocurre en un contexto de juego”.
“Cuando se expresó, que detrás de este hecho había una situación de bullying, el establecimiento activó los protocolos e inició la investigación, no encontrando que este terrible hecho pueda ser explicado por una situación de esta naturaleza y toda la investigación realizada sigue confirmando que lo ocurrido fue un accidente, terrible, doloroso para toda la comunidad y la familia, pero, en definitiva un accidente”, afirmaron.
De todas maneras, confirmaron que “a la fecha se siguen revisando los protocolos y procedimientos, para identificar aspectos que deban ser subsanados, en concordancia con las orientaciones que desde la Superintendencia han sido entregadas”.
“Creemos indispensable que la opinión pública sepa que es a partir de una publicación malintencionada que difunde información totalmente falsa, que nos vemos en la obligación de aclarar que los estudiantes involucrados en el incidente, pertenecen al mismo curso, en un rango de edad similar de 10 y 12 años, que no existen estudiantes migrantes involucrados, y si así lo fuera, no es razón para condenar a ningún niño, niña o adolescente. En Chile se protegen las infancias”, agrega el comunicado.
“Nuestra comunidad educativa tiene como uno de sus pilares fundamentales, el respeto a las diferencias, cultivamos la interculturalidad como uno de nuestros sellos y valores, por ello rechazando categóricamente la xenofobia y cualquier discurso discriminatorio hacia nuestros estudiantes”, concluye el escrito.
