El pequeño Agustín Cortez, oriundo de Talcahuano, pero que se encuentra internado en el Hospital de niños Luis Calvo Mackenna, recibió un riñón del bombero Nicolás Soto de 20 años, quien falleció el martes y cuya familia decidió donar sus órganos tal como era su voluntad.
Fue el padre de Agustín, quien a través de su cuenta en Facebook agradeció el gesto de la familia de Nicolás e informar el estado de su hijo tras la operación.
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"El Agus está un poco mejor. El riñoncito aún no agarra fuerzas como los médicos quieren, pero vamos con fe y que con el paso de las horas vaya evolucionando mucho mejor", dice el mensaje en el que además aparece una fotografía del pequeño junto a una del bombero fallecido.
Nicolás Soto murió el martes, luego de varios días de estar internado en el Hospital Regional de Temuco, hasta donde fue trasladado con muerte cerebral luego que el canastillo que transportaba agua en un helicóptero lo golpeara en la cabeza, mientras trabajaba combatiendo los incendios forestales que afectan al sur del país.
La familia del bombero decidió donar todos sus órganos, cumpliendo así con la voluntad del joven.