La familia del bebé de nueve meses que falleció el jueves tras recibir un impacto de bala en la cabeza, mientras dormía en su casa en la comuna de La Pintana, realizó su velorio la tarde de este viernes.
Los padres conversaron con el periodista de T13 Emilio Sutherland, instancia en la que aprovecharon para agradecer a todas las autoridades por su ayuda, especialmente a la alcaldesa de la comuna, al ministro del Interior, los médicos y a Carabineros.
Linda Villegas, la madre de Baltazar, señaló que "quiero dejar en claro que este sector, donde están todos presentes el día de hoy, es un lugar súper seguro. Esto es primera vez que se ve. No estigmaticemos que La Pintana es malo porque no es así".
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En ese sentido, declaró: "Cuiden a sus hijos porque ya sabemos que nisiquiera en el hogar en el que estamos viviendo estamos seguros".
Y agregó: "Quiero que Baltazar sea el último que muere en esta circunstancia. No tapen el sol con un dedo, porque decir justicia para Baltazar, creo que es más que eso. De verdad espero que Baltazar haya sido el último".
Por su parte, el padre del menor fallecido, Yainer Díaz, aseguró que "nadie se espera que esto le suceda. Vine de Venezuela escapando de una situación que no es ciega para ningún ojo acutalmente en el mundo".
"Baltazar llegó a mi vida y la cambio de una manera que yo nunca me imaginé. Yo era una persona que caminaba por la vida simplemente, pero Baltazar llegó y le dio un sentido a mi vida. Me dió fuerzas para luchar, para emprender, para querer ser una mejor persona, para progresar", añadió.
El padre por útlimo condenó a las personas que manipulan armas sin responsabilidad.
"Yo lo que pido es que todas esas personas que de alguna u otra manera manipulan un arma de fuego para querer aumentar su ego o darse entender que son más hombres que otros, que piensen en las repercusiones que tienen sus actos, que piensen que delante de esas balas o de cada proyectil que disparan pueden haber un niño, una mujer o un padre de familia. Dejan dolor y es algo que jamás sanaremos".
Los padres también recordaron que el día anterior había sido normal, jugaron con el niño y que bromeó como nunca, incluso al rato antes de dormir siguieron disfrutando con el bebé. "Fue como si se estuviera despidiendo".