El Gobierno de Gabriel Boric ingresó, este jueves, el proyecto de reforma tributaria anunciado hace una semana y que fue uno de los ejes de campaña del actual jefe de Estado. La norma comenzará a ser discutida en el parlamento el lunes, por lo que el Ejecutivo aún podría hacerle algunas modificaciones.
Tal como había anticipado el ministro de Hacienda, Mario Marcel, la reforma busca recaudar 4,1 puntos del Producto Interno Bruto (PIB), avanzando en reducir la desigualdad social.
Argumentando sobre la necesidad de un cambio en la forma en que se tributa en Chile, el Ejecutivo aludió a la ampliación de los derechos sociales y prometió que, a partir de 2026 se podría llegar a recaudar 12 mil millones de dólares.
“Para dar un salto al desarrollo, es imprescindible avanzar en la ampliación de derechos sociales, invertir en la diversificación y productividad de la economía, y dar fuerza a la descentralización de nuestro país”, dice el proyecto.
“En particular, el aumento en la tributación de las personas será destinado a la ampliación del Estado de Bienestar. Del incremento total proyectado, 2,9 puntos del PIB serán destinados a dos profundas reformas comprometidas por nuestra administración: al sistema de pensiones y al sistema de salud”, agrega.
La norma propone aumentar los impuestos para la población que esté dentro del 3 por ciento de mayores ingresos, reduce las exenciones tributarias y propone un nuevo royalty minero e impuestos correctivos.
“La agenda de reducción de exenciones y combate a la evasión y elusión contribuirá a financiar el esfuerzo en la ampliación de derechos sociales y, además, a paliar una deuda que arrastramos hace años: aumentar la productividad y diversificar nuestra economía, con perspectiva medio ambiental y de manera descentralizada. A ello contribuirán los recursos del Royalty, proyecto en el que reconocemos el trabajo de Diputados, Diputadas, Senadores y Senadoras, y que perfeccionaremos mediante indicaciones”, explica la norma.