La Cámara de Diputadas y Diputados aprobó las modificaciones del Senado a los proyectos de ley que aumentan las penas por los delitos de secuestro y de porte de armas en lugares “altamente concurridos”. Ambas normativas fueron despachadas y deberán ser promulgadas por el Presidente de la República para convertirse en ley.
Los proyectos aprobados son los primeros que despacha el Congreso tras la muerte de la carabinera Rita Olivares en Quilpué, que agilizó la agenda de seguridad del gobierno y reimpulsó distintas normas sobre este tema.
Las modificaciones al proyecto que tipifica el delito de sicariato en tanto, fue rechazado por la cámara baja, por lo que se tendrá que conformar una Comisión Mixta para resolver las diferencias con el Senado en este tema.
En concreto, la nueva norma castiga con penas de entre 5 y 15 años a quien retenga a una persona para obtener un rescate, y aumenta la sanción cuando la víctima sea objeto de homicidio, violación, castración o lesiones graves.
En el caso del porte de armas, aumenta el castigo para quienes llevan armas de fuego sin autorización en lugares altamente concurridos. La pena ahora iría de entre 15 a 20 años de cárcel, sin perjuicio de los eventuales delitos que se comentan con estas armas.