“Yo lamento que el gobierno, mi gobierno, por el cual me la jugué, esté avalando estas prácticas bastante antidemocráticas”, dijo el diputado RN Leonidas Romero durante la sesión de este miércoles en la comisión de Constitución de la Cámara.

El debate incluía la discusión de cuatro mociones que dicen relación con eliminar las inhabilidades a autoridades con cargos populares para poder presentarse a las elecciones de 2021. Esa idea ha sido avalada por La Moneda -el ministro de la Segpres, Cristián Monckeberg, ha dicho que hay que permitir la competencia y que la gente luego decida por quién votar- y esta semana fue retomada su discusión tras su urgencia legislativa.

Las mociones no tuvieron apoyo oficialista. Los UDI no se presentaron a la comisión. En RN, además de Romero -quien reemplazó a Camila Flores-, estuvo Andrés Celis -quien también está en contra de la iniciativa-, en representación de Gonzalo Fuenzalida.

Pepe Auth (diputado independiente), uno de los firmantes de una de las mociones, incluso, dijo que ahora, con el resultado del domingo, y el inicio del proceso constituyente, ya no correspondía llevar adelante esta ley.

La única que intentó salvar la situación fue la diputada RN Paulina Núñez, quien propuso que en la próxima sesión escuchen la posición de los alcaldes y cores para finalmente llevar a cabo la votación.

Ahora bien, si el proyecto se hubiese puesto en votación este miércoles, la iniciativa no hubiese prosperado. “Lo que la ciudadanía espera de nosotros no está contenido en esta reforma”, dijo Celis en la comisión.

El episodio de este miércoles ilustra el ambiente tenso que vive por estos días el oficialismo.

La iniciativa para eliminar la inhabilidad de alcaldes, cores, concejales y parlamentarios ha sido una petición encarecida de la UDI -y parte de RN- para poder reparar la situación de las autoridades impedidas de seguir en cargos populares luego de la aprobación del límite de la reelección; dicha iniciativa, de hecho, en julio pasado desató un problema político entre la UDI y el entonces ministro del Interior, Gonzalo Blumel. El exsecretario de Estado defendió la postura de su partido, Evópoli: tomar la bandera de la renovación de la política y, por tanto, bregar por iniciativas como el límite a la reelección.

El llamado “a comer pasas” de Monckeberg 

“A veces es bueno comer pasas para poder recordar todo lo que se ha hecho, de verdad lo digo, porque el gobierno ha hecho mucho; no lo suficiente, porque nunca va a ser suficiente en tiempos de pandemia y con la cesantía que tenemos, pero vaya que se ha hecho harto. Y lo mínimo que uno esperaría es un reconocimiento al esfuerzo de lo que se está haciendo, al menos de los propios. Yo entiendo que la oposición te lo critique, pero al menos de los propios que exista un reconocimiento”, dijo, en tanto, este miércoles el ministro Monckeberg luego de asistir a la comisión de Constitución y un día después de que el oficialismo casi completo le diera el apoyo a la iniciativa opositora del retiro anticipado del segundo 10% de los fondos de AFP, en la misma instancia de la Cámara.

El secretario de Estado respondía por ese desorden oficialista y, también, por la falta de apoyo que había vivido minutos antes en Constitución. Monckeberg desdramatizó el hecho, pero hizo ese llamado de atención.

El día después del expresivo 11-1 en la comisión de Constitución en torno al segundo 10 fue intenso, pero sin anuncios del gobierno. Las críticas públicas de diputados oficialistas subieron de tono. Los jefes de bancada de RN y de Evópoli, Sebastián Torrealba, y Luciano Cruz-Coke, criticaron la inacción del gobierno y afirmaron que debe fijar ya una estrategia. Dichos que, claramente, muestran una tensión entre el gobierno y el oficialismo, pues ambos son negociadores con La Moneda y, en general, se muestran alineados ante las decisiones de Palacio.

La tarde de este miércoles, además, el senador RN Francisco Chahuán envió un comunicado de prensa señalando que “la inacción del Gobierno está permitiendo el segundo retiro del 10%”.

Una semana compleja para el comité político

Este miércoles, el nuevo comité político -el que asumió por la resaca de la aprobación del primer 10%- cumplió tres meses al mando. Hasta ahora, el equipo liderado por Víctor Pérez (Interior, UDI) había contenido a los diputados, sin embargo; votaciones tan relevantes no se habían dado hasta ahora.

De hecho, el salario mínimo no concitó apoyo total oficialista. Solo se había logrado con la acusación constitucional en contra del exministro de Salud Jaime Mañalich. Había dudosos en ese entonces como Joaquín Lavín (UDI) y Andrés Celis (RN), pero los ministros finalmente pudieron ordenar sus filas.

Esta semana, además, es la siguiente al aplastante triunfo del Apruebo -y la derrota de parte de la derecha que estuvo por el Rechazo- y donde el ministro Pérez ha estado abocado a la defensa de la acusación constitucional en su contra que, en principio, debía ser votada este viernes, pero finalmente se corrió para el próximo martes.

La presidenta de la UDI, Jacqueline van Rysselberghe, dicen sus cercanos, ha estado concentrada en apoyar a su ministro y, de hecho, iba a viajar especialmente este viernes desde Concepción para dar una señal de respaldo a Pérez.

Evópoli, en tanto, está la encrucijada de seguir defendiendo a rajatabla a su ministro de Hacienda, Ignacio Briones -este martes el diputado Sebastián Álvarez votó en contra del gobierno-, en medio de esa inacción del gobierno ante una alternativa contundente que contrarreste el ofrecimiento de la oposición de un nuevo 10%.

Briones, de hecho, ha recibido críticas del oficialismo. El diputado UDI Jorge Alessandri dijo que podría haber hecho copy-paste al discurso del secretario de Estado en Constitución en relación a los fallidos argumentos del primer 10%. 

RN, por su parte, debe luchar por la defensa de su ministro de la Segpres, extimonel del partido que, en todo caso, los últimos días ha recibido negativas de sus parlamentarios por esa inacción del gobierno, como la llaman.

El nuevo punto de inflexión de la centroderecha, además, se da en medio de la incertidumbre por lograr un acuerdo en la reforma de pensiones, estancada durante casi nueve meses en el Senado. Los partidos  de Chile Vamos han pedido celeridad en ese acuerdo y el propio gobierno ha señalado que es una prioridad.

El Presidente Piñera, de hecho, este lunes, en el acto de Chile Vamos -donde irónicamente llamaron a la unidad del sector-, dijo que no podían esperar dos años a que los constituyentes se pusieran de acuerdo para solucionar las urgencias que tiene hoy la ciudadanía.

Con todo, los partidos siguen insistiendo por una estrategia clara que logre justificar un rechazo de plano al segundo 10%.

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