El presidente del Partido Comunista, Lautaro Carmona, reflexionó sobre el primer año del gobierno de Gabriel Boric, los que fueron marcados por los procesos constitucionales, pero especialmente por la convención constituyente que representó una "derrota estrepitosa" para la actual administración.
En conversación con el exministro español Pablo Iglesias, el timonel del PC planteó que "los procesos de instalación de un gobierno suelen, no es obligación, esto es como un cumplimiento de una referencia regular, tienen o los seis primeros meses o las 20 primeras medidas como tiempos que hay disposición a esperar que avance, que se presente, es lo que algunos llaman el 'veranito de San Juan' o la ‘luna de miel’. Bueno, en este Gobierno eso no se pudo hacer".
Para Carmona, "nos saltamos de ahí (la instalación) a cuando se cumplía esto que era en septiembre (plebiscito de 2022) y se empezó a girar sin reflexión alguna, incluso con un tono un poquito arrogante, que el gobierno vendría de septiembre para adelante. Y como en septiembre íbamos a ganar la constituyente, era otro país. Bueno, no fue otro país, sufrimos una derrota estrepitosa".
"Creo yo que se exageró la necesidad, primero, de qué se trata una constitución. O sea, faltó ponerle nombre a las calles. Eso no se puede hacer. Había un debate un poquito inmaduro", sostuvo el presidente del PC.
Repaso de Carmona a la convención
Respecto al proceso de la convención constituyente, Carmona recordó que "había una composición donde lo principal provenía de la llamada Lista del Pueblo y de otros sectores que no tenían militancia de partido. Nosotros teníamos cinco miembros de 155, pero nos compramos el cuento que era la constitución de los comunistas. Eso no ayudó a que pusiéramos nuestra nota".
Asimismo, criticó que "nunca se provocó una coordinación entre las corrientes socialistas, Frente Amplio y estos cinco comunistas. Se provocó la profecía autocumplida, llegamos a esta tremenda derrota y nos encontramos con nada de lo que pudimos haber avanzado, y con un gobierno que partió no solo con tres años y medio recién, sino con ya una carga en contra".