Cerca de las 8:00 horas, Marco Enríquez-Ominami llegó a la Fiscalía junto a su abogado, Ciro Colombara, a declarar en calidad de imputado en el marco investigativo del caso SQM.

"A la salida hablamos", fue su único comentario.

El ex candidato presidencial fue citado raiz de la presunta emisión de boletas ideológicamente falsas a cargo de la empresa de su ex asesor y mano derecha, Cristián Warner, en asesorías que alcanzan los $362 millones.

Se trata de 34 facturas que fueron rectificadas por SQM Salar y por las cuales se querelló el SII el pasado 22 de septiembre.

Warner sostuvo en su declaración del 10 de junio de 2015 que se trataba de servicios por asesorías comunicacionales que incluyen "análisis, sugerencias de consejos publicitarios y de todo lo que tenía que ver con las comunicaciones de la empresa”.

Pese a los declarado por Warner, el servicio sostiene que se pudo constatar que los documentos solamente incluyen “resúmenes de hechos noticiosos publicados en medios de comunicación nacional de carácter escrito (…) sin realizar ningún análisis de los mismos ni formular tampoco sugerencias o consejos”.

Junto con esto el SII señala que no se logró constatar que los servicios efectivamente hayan sido entregados a la firma y que “aún en el evento de haberse hecho, no guardan relación alguna con la actividad desarrollada por dicho contribuyente”.

Los fiscales Carmen Segura y Emiliano Arias estarán a cargo de la diligencia. Por su parte, Pablo Gómez, fiscal regional de Valparaíso y responsable de la causal, no participará en el interrogatorio.

Hasta el frontis de la fiscalía llegaron simpatizantes del ex presidenciable.

Si bien ME-O goza la facultad de guardar silencio, la semana pasada aseguró que tiene una "total" disposición a colaborar.

Inicialmente, la Fiscalía lo había citado a declarar el pasado 22 de octubre, pero la diligencia fue postergada cuando su abogado solicitara el expediente del caso antes de que se concretara la declaración.

Luego de eso, la diligencia nunca se pudo concretar debido a los constantes viajes del ex candidato presidencial a Argentina, Francia y Cuba, entre otros países.

Por eso, fue blanco de diversos cuestionamientos y críticas de algunos que consideraban que "evitaba" la declaración. De hecho, algunas especulaciones apuntaban a que ME-O no quería hacerlo ante el ex fiscal nacional, Sabas Chahuán, pero que sí lo haría ante su sucesor, Jorge Abbott. 

Pero el líder del PRO salió en su defensa a través de Twitter, donde aseguró que la postergación del proceso se debió a razones ajenas a él:

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