El senador, médico y miembro de la Comisión de Salud, Guido Girardi (PPD), se siente decepcionado por la gestión del Ministerio de Salud. De esta forma lo manifestó tras la presentación de las autoridades de la cartera, en la Comisión: “Estamos muy por debajo del nivel requerido para cumplir con las metas establecidas”, reclamó. 

La titular de Salud Carmen Castillo y los subsecretarios de Redes Asistenciales, Angélica Verdugo y de Salud Pública, Jaime Burrows, explicaron a los parlamentarios las medidas para  resolver los retrasos en el Plan de Inversiones, la mantención de las listas de espera y los “diversos déficits históricos del Sistema Público”.

Sobre el retraso en la construcción de hospitales, Girardi afirmó que “sería un milagro si se cumplen las metas pues hubo una actitud negligente al poner a cargo a personas que son excelentes médicos de familia, pero sin la competencia necesaria en infraestructura hospitalaria”, argumentó.

Luego agregó que “se comprometieron 60 hospitales de los cuales 20 quedarían terminados, pero sólo hay seis en construcción. Con este modelo de gestión no se cumplirá  los compromisos de la Presidenta. Es preocupante que a la fecha tenemos una ejecución presupuestaria sólo de un poco más de un 3 %", recalcó.

Girardi manifestó su discrepancia además, señalando que “nos entregaron un panorama optimista, pero cuando voy a los consultorios, postas y hospitales veo otro Chile. Parece que hubiera dos países distintos”, añadió.

El parlamentario afirmó que “hay aspectos positivos, pero  una gestión muy por debajo de las exigencias requeridas para resolver los problemas”, apuntó.

Según Girardi, "si sólo se toman medidas de parche seguirá la migración del Servicio Público al mundo privado y habrá que comprar allí las atenciones para que se sigan enriqueciendo”, dijo. 

El senador criticó también: “Teníamos 495 médicos formándose como pediatras, internistas, ginecólogo y siquiatras para la atención primaria, pero esa política fue eliminada por el Minsal y optaron por tener una medicina para pobres donde son atendidos por profesionales sin especialidad que deben hacer de maestros chasquillas", considera. 

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