El unicornio es una criatura mitológica que ha estado presente en varias caricaturas, cuentos y películas de nuestra infancia. Este ser ha tenido a lo largo de la historia distintas representaciones.

Hasta ahora, la representación más antigua es la que corresponde a un sello descubierto en la región norte del Indo, que sería del año 2.600 a.C, y fue descubierto por Alexander Cunningham en 1872. Lo que para Alexander era un "toro sin joroba", se trataba en realidad del "unicornio del Indio".

Posteriormente, la representación de la criatura tomaría distintas formas, siendo generalmente una mezcla entre ciervo, cabrito y caballo en el folclore europeo de la Edad Media, con un enorme cuerno en espiral con poderes increíbles.

 

En la modernidad, tomó la forma que nos es familiar, correspondiente a un caballo blanco con un gran cuerno en la cabeza.

Viendo que el "unicornio" como tal es en realidad varias representaciones que han ido mutando en el tiempo, es muy probable que el "unicornio original" sea en realidad muy distinto a lo que pensamos.

El real unicornio existió y no lucía como creíamos

Actualmente, se conoce de una especie que sería la que dio origen a los "unicornios". Se trata de la especie Elasmotherium sibiricum, hallada en Kazajistán y conocida popularmente como unicornio siberiano.

Si bien se pensaba que esta especia desapareció hace unos 350.000 años, investigadores de la Universidad Estatal de Tomsk en Siberia, Rusia, descubrieron un fósil en 2016 que demostraría que en realidad habitó la Tierra hasta hace unos 29.000 años.

Esto quiere decir que habría habitado en la misma época que el ser humano, que ya el hombre llevaba existiendo miles de años antes de la extinción del enorme animal.

Eso sí, el animal era muy distinto al que conocemos como unicornio actualmente. Pesaba unas 4 toneladas, medía dos metros de altura y cinco metros de largo. Más parecido a un mamut que a un caballo.

Pero es muy probable que el unicornio haya surgido del encuentro entre el humano y el unicornio siberiano, o sino a través del hallazgo de sus cadáveres por parte de los antiguos hombre.

¿Cómo logró sobrevivir tantos años?

Ahora, los científicos buscan descubrir cómo es posible que el Elasmotherium sibiricum haya logrado sobrevivir muchos más años de lo que se pensaba.

"Lo más probable es que el sur de Siberia Occidental fuera como un refugio, donde este rinoceronte vivió mucho más tiempo en comparación con el resto de su especie", dijo Andrey Shpanski, paleontólogo de la Universidad Estatal de Tomsk.

"También existe la posibilidad de que haya podido emigrar y habitar durante un tiempo en las zonas más al sur", agregó.

 
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