Hasta la gente más disciplinada comete errores que pueden hacerles perder algunos beneficios de llevar una dieta sana.

Si eres de los que cuidan mucho su alimentación seguro que te interesa saber qué pequeños detalles pueden ayudar a que tu cuerpo absorba más y mejor los nutrientes que consumes.

Aquí van siete trucos que te ayudarán a maximizar los beneficios de algunos alimentos.

1. Consumes semillas enteras de lino

Las semillas de lino tienen omega-3, fibra y lignanos (antioxidantes) y además son un laxante natural que se utiliza para combatir el estreñimiento.

Muchas personas las consumen enteras durante el desayuno, añadidas al yogur o a los cereales, pero entonces las semillas pueden pasar por nuestro intestino sin ser digeridas.

Por eso algunos nutricionistas, como Cara Rosenbloom, recomiendan consumir el lino triturado o molido para facilitar la absorción de sus nutrientes.

2. Consumes bebidas energizantes después de hacer deporte

Las bebidas energizantes contienen un alto nivel de azúcar y sales minerales y están diseñadas para reemplazar los fluidos y los electrolitos que se pierden con el sudor. Pero según los nutricionistas no es necesario consumir este tipo de bebidas después de hacer ejercicio a no ser que se haya hecho un esfuerzo excepcional, como correr un maratón.

"Si se ha hecho menos de una hora de ejercicio no es necesario tomar nada de reposición", le dice a BBC Mundo Jesús Román, presidente de la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación

"Y en general, después de hacer deporte aficionado, tampoco", añadió.

Lo que recomiendan los nutricionistas es rehidratarse bebiendo un vaso de agua.

3. Te saltas el aliño en la ensalada

Los vegetales contienen vitaminas liposolubles, como la A, E y K, además de varios antioxidantes, que requieren de grasa para poder ser absorbidos por nuestro organismo.

Por eso saltarse un aliño con aceite puede hacer que queden atrás nutrientes clave de la ensalada. En lugar del aliño con aceite también pueden ayudar en esa absorción ingredientes ricos en grasas como el aguacate, las semillas, las nueces o el queso.

"Para cualquier dieta que lleves necesitas una cierta cantidad de grasa para que las vitaminas que son solubles en grasa estén dispersas y se puedan digerir y absorber", explica Román.

"De todas formas es muy difícil que en una dieta no haya grasa", apunta el especialista.

4. Mezclas los suplementos vitamínicos con el café o el té

La cafeína puede dificultar la absorción de algunas vitaminas y minerales de los suplementos alimenticios, como el calcio, el hierro o las vitaminas B y D.

Así que cuando tomes tus pastillas de suplementos vitamínicos nutricionistas como Cara Rosenbloom recomiendan hacerlo con agua y preferiblemente antes o después de tomar bebidas con cafeína, como el café, el té o la cola.

Aún así, el especialista en nutrición Jesús Román matiza que el café no dificulta la absorción de una manera aguda. "Los astringentes, como el tanino, limitan mucho más la absorción", asegura.

En cualquier caso, "casi nunca se comen los alimentos puros, aislados, así que siempre hay interacciones", apunta Román.

5. Te olvidas de agitar el envase de la leche de almendra, soja o arroz antes de beberla

Las alternativas a la leche de vaca, como la leche de soja, almendra o arroz, están con frecuencia fortificadas con calcio y vitamina D. Pero los nutrientes añadidos no se disuelven en el líquido muy bien y tienden a precipitarse al fondo del envase.

Si bebes la leche antes de agitarla es posible que te pierdas todos esos suplementos.

Según Román, el calcio añadido, que es un calcio mineral, no se disuelve en estas leches como el que va naturalmente dentro de la leche de vaca. Así que agitarlo es correcto, aunque el especialista recomienda, si es posible, consumir leche de vaca.

6. Crees que consumes alimentos probióticos porque comes yogur pero...

El yogur es leche fermentada y el beneficio más destacable de este alimento es su contenido probiótico, que ayuda a mantener la salud de nuestra flora intestinal.

Pero si el yogur está pasteurizado o esterilizado ya no tiene los microorganismos vivos que queremos que permanezcan activos en nuestro intestino, así quepasa a ser un producto lácteo más, que contiene calcio, vitaminas y proteínas, como la leche, pero no tiene utilidad probiótica.

Comer un yogur pasteurizado es, nutritivamente, como beberse un vaso de leche, según Jesús Román.

7. Confundes comer ensalada con comer vegetales

Se trata de una confusión de volumen, según Román. Hay algunas personas que viven a base de ensaladas y creen que ya comen suficientes vegetales.

"Una ensalada básica, que tiene 30gr de lechuga, un par de rodajas de tomate y unas aceitunas no es suficiente porque no tiene volumen, así que no tiene la suficiente densidad nutritiva", dice, puntualizando además que algunos de estos ingredientes son en un 90% agua.

Para cumplir con la recomendación de la OMS de comer al menos 5 porciones de vegetales y fruta al día, de 80gr la porción, hace falta incluir en la dieta vegetales con más densidad, es decir, verduras guisadas, frutas y legumbres.

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