¿Qué tienen en común Beyoncé, The Rolling Stones, U2, AC/DC y Lady Gaga?

Todos utilizan los servicios de una compañía de logística londinense para mover por todo el mundo el material que necesitan para sus conciertos.

El año pasado, Beyonce viajó al Reino Unido con su gira mundial Formation.

Para poder transportar sus escenarios, la cantante necesitó 7 aviones Boeing 747 y más de 70 camiones.

Y eso que ninguno de sus técnicos, músicos y bailarines, ni la propia Beyonce, viajaban en esos vuelos.

"Fue el mayor traslado que hemos hecho en la historia de la compañía", asegura Martin Corr, director general de la empresa de transporte Sound Moves.

El almacén de Sound Moves está lleno de productos ya embalados.

El escenario que necesita Beyonce para sus conciertos es increíblemente caro de transportar...

Transporte aéreo, caro pero rentable

Cada vez son más las compañías que eligen el transporte aéreo para mover sus productos.

Y eso que, independientemente de si son diamantes o piezas de autos, mandar bienes en un avión puede llegar a resultar seis veces más caro que hacerlo por barco.

Por curioso que parezca, a pesar de que el transporte aéreo mueve tan sólo el 1% de las importaciones y exportaciones británicas en términos de tonelaje transportado, representa el 40% de las importaciones y exportaciones en términos de valor.

En Reino Unido, el aeropuerto más importante para el transporte de mercancías es el londinense Heathrow, por el que pasan más de US$130.000 millones en bienes cada año.

Una cifra que supera a la de los productos que entran y salen del país a través de los puertos de contenedores más grandes del país, Felixstowe y Southampton, juntos.

A pesar de lo que cuesta el transporte aéreo, utilizar aviones en vez de barcos reduce considerablemente el tiempo que toma poner un producto en el mercado.

"Utilizamos el aeropuerto de Heathrow para la mayoría de nuestro transporte aéreo".

"Está cerca de Londres, tiene buenas conexiones por carretera, gran capacidad logística y muchos vuelos", dice Martin Corr.

Su empresa, Sound Moves, tiene su sede en el oeste de Londres, muy cerca de la terminal de cargo del aeropuerto de Heathrow.

Con una facturación anual de US$22 millones, es una de las empresas logísticas más grandes de la industria musical.

Durante los últimos 20 años Sound Moves ha trabajado con muchos grupos y cantantes importantes, desde David Bowie a The Rolling Stones o Lady Gaga.

"Dejé la escuela prácticamente sin cualificación y estuve viviendo en casa de mis padres hasta que un día mi madre me dijo: sal y ve a buscar trabajo", dice Corr.

"Como vivía en el oeste de Londres, Heathrow era el lugar adecuado para buscar empleo".

Después de haber pasado unos meses trabajando para una empresa de transporte aprendiendo el negocio, Corr se pasó a otra compañía especializada en el sector musical.

En 1996, puso en marcha Sound Moves junto a dos socios.

El propio Martin Corr es fan de la banda australiana AC/DC.

Una guitarra de Angus Young de la marca Gibson firmada por todos los integrantes de la banda preside su oficina.

"Y eso que no sé tocar. Nunca quise ser músico", dice Corr.

En los almacenes de Sound Moves hay cientos de pallets llenos de material y equipos de sonido listos para ser enviados a cualquier parte del mundo.

"Puede que un lunes estemos en Londres y el miércoles o el jueves preparando un espectáculo en Los Ángeles".

"Antiguamente solíamos tener un negocio muy estacional, con muchos viajes hasta Navidades y de marzo a septiembre, que era la temporada de festivales".

"Hoy en día los artistas actúan los 12 meses del año".

Haciendo giras es como los artistas venden entradas y ganan dinero, explica Corr.

"Ahí es donde entramos nosotros, ofreciéndoles apoyo en sus viajes".

Heathrow, al límite de su capacidad

Cuando Beyonce llegó a Reino Unido el año pasado, Sound Moves tuvo que usar los aeropuertos de Doncaster y Prestwick en vez de Heathrow.

La razón fue la falta de flexibilidad de los aeropuertos de Londres.

"Tuvimos que descargar el avión muy rápido. Los artistas van siempre a toda prisa. Quieren ser vistos por el público cuanto antes".

El hecho que Sound Moves no pudiera usar el aeropuerto de Heathrow para la gira de Beyonce es significativo, dice Nick Platts, director de Carga del aeropuerto.

"Recuerdo las conversaciones que mantuve con Martin durante días tratando de ayudarle. La verdad es que no pudimos ofrecerle la flexibilidad que necesitaba".

Platts asegura que el aeropuerto de Heathrow está trabajando cerca de su máxima capacidad, por lo que prácticamente no hay espacio para ampliar el tráfico de carga.

"Estamos desviando tráfico a otros aeropuertos".

"Necesitamos ampliarlo y construir una tercera pista de aterrizaje sólo para satisfacer la creciente demanda acumulada. Eso sin contar lo que creceremos en el futuro", explica.

"La razón por la que Heathrow tiene éxito no es el transporte de pasajeros, sino porque empresas como la nuestra se dedican a mover piezas de autos, salmón escocés, sangre, plasma y otras medicinas, diamantes o piedras preciosa. Para eso sirve el transporte aéreo".

De vuelta en las oficinas de Sound Moves, Martin Corr está preparándose para la gira Joshua Tree de U2.

"Ya está todo planeado y organizado. Vendrán a Reino Unido en avión un fin de semana de julio. Su calendario será muy apretado".

Aunque muchos pueden pensar lo contrario, Corr niega que su industria sea glamurosa.

"Ni asistimos a fiestas entre bastidores ni volamos en aviones privados".

De hecho, "no tenemos días libres hasta que terminan las giras".

Eso sí. A pesar de lo que dice, Corr tiene una botella de champán en la nevera de su oficina.

"Bueno, el rock and roll no existiría si no hubiera champán", dice riendo.

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