En la batalla por dominar la tecnología 5-G, el fabricante estadounidense de chips Qualcomm logró una victoria importante.

Después de más de dos años de batallas legales con Apple, este mes de abril llegó a un acuerdo con la compañía de la manzana que le permitirá tener una posición dominante en lo que será ya la conexión del futuro.

En enero de 2017, Apple interpuso dos recursos legales contra Qualcomm alegando que había abusado de su posición de mercado dominante en la fabricación de microchips módem, los que permiten que los teléfonos se conecten a internet.

En julio del mismo año, Qualcomm, que es el principal proveedor de procesadores para dispositivos móviles del mundo, acusó a Apple de violar seis de sus patentes al utilizar chips de empresas rivales como Intel.

Ahora, el acuerdo firmado entre ambas tecnológicas establece, entre otras cosas, que Apple debe abonar al fabricante de chips una cantidad no especificada, según el comunicado que ambas compañías publicaron en sus página web.

También que la compañía fundada por Steve Jobs seguirá usando a Qualcomm durante por lo menos los próximos seis años como principal proveedor de chips módems, sin los cuales un teléfono móvil no tiene conexión.

No tendrá que ser el único suministrador de la compañía de la manzana, pero es el único que tiene la capacidad para que Apple pueda competir en el terreno de dispositivos con tecnología 5G con su máximo competidor: Samsung.

Una posición ventajosa

Y es que Qualcomm parte con una posición preferente, como explica a BBC Mundo Raquel Pérez Leal, doctora de la Universidad Carlos III de Madrid y experta en sistema de comunicaciones.

"En este momento Qualcomm es el (fabricante) que está más avanzado en garantizar la tecnología 5G", afirma.

"Apple es líder y se dirige a un segmento muy alto del mercado y le interesa lanzar los productos lo antes posible, así que no se puede permitir llegar tarde ni que las prestaciones sean inferiores a las de sus seguidores más próximos, como Samsung. Y Qualcomm es en este momento el que ha lanzado el chip módem más potente".

Es por eso que quizás, tras un litigio legal de más de dos años, Apple haya decidido enterrar la disputa y pagar.

"De acuerdo con la información que hacen pública los fabricantes y la información de las revistas especializadas, parece que las prestaciones (de los chips de Qualcomm) son mejores que las de competidores como Samsung, Huawei o MediaTek Inc", dice Pérez Leal.

Qualcomm tiene ya el chip integrado, un formato que ocupa mucho menos espacio físico en el dispositivo, explica López Leal, dejando más lugar para que el celular tenga otras características que resulten atractivas para el consumidor.

Además, Qualcomm asegura que es la única compañía que ha desarrollado los chips multiestándar, un único utensilio que es capaz de conectarse a través de 3G, 4G y 5G.

Esto supone una clara ventaja, ya es que un mismo dispositivo podrá acceder a distintas redes en función de la disponibilidad.

Otro factor a tener en cuenta, señala la experta, es que la posición dominante de Qualcomm en el mercado le permite ofrecer productos muy competitivos a menor precio al gozar de una economía de escala: a mayor producción, más se abaratan los costos y se incrementan los beneficios por unidad producida.

Pocas opciones para Apple

Pero es que además, Apple se ha quedado casi sin proveedores alternativos a los que acudir, por lo que Qualcomm es ya casi un monopolio en el sector.

Intel, a quien Apple confió la fabricación de los chips durante los dos años de litigio legal con Qualcomm, anunció horas después de conocerse el acuerdo entre las dos grandes tecnológicas que se retiraba de la fabricación de chips para tecnología 5G alegando que el margen de beneficio no era tan grande como en otros de sus productos.

Qualcomm no es el único fabricante de este tipo de chips. Dejando fuera a Intel, quedan también Samsung, Huawei y MediaTek Inc.

Pero mientras los dos primeros solo fabrican chips para sus propios dispositivos, el último suministra estos componentes a teléfonos de baja gama, muy lejanos al producto refinado que vende Apple.

Descartada queda la opción de que Apple pueda fabricar sus propios chips. La razón es clara: "La tecnología de las comunicaciones no es el punto fuerte de Apple, sino la fabricación de equipos de usuarios", dice la experta Pérez Leal.

El gigante Qualcomm

Qualcomm es líder en el mercado, y su especialización desde hace muchos años en el terreno de conexiones inalámbricas lo hacen un actor clave en el desarrollo de tecnologías móviles, asegura la doctora Pérez Leal.

La sola noticia del acuerdo ya reportó los primeros beneficios al fabricante estadounidense. Sus acciones subieron en más de un 20% cuando el 22 de abril se dio a conocer que el acuerdo había entrado en vigor.

Además, la empresa espera ingresar alrededor de US$2.500 millones más al año por el suministro de sus productos a Apple, según el informe de ingresos que la tecnológica presentó a sus inversores.

Los ingresos vendrán, especialmente, del cobro de regalías a la compañía de la manzana por el uso de su tecnología en cada uno de los iPhone vendidos, pero cabe la duda de si será finalmente el consumidor el que acabe pagando el precio.

"Como este tipo de chips son muy caros, quizás al principio Apple pueda repercutir, pero solo parcialmente, el precio de esa regalías en el producto y con el tiempo puede ir aumentando la repercusión en el cliente final", opina Pérez Leal aclarando que eso, en todo caso, será una decisión empresarial.

De acuerdo a un informe de empresas de la agencia de noticias Reuters, Qualcomm fue fundada en 1985 y actualmente tiene su sede en San Diego, California (Estados Unidos). Tiene más de 35.000 empleados en todo el mundo.

Su especialidad son los llamados circuitos integrados (chips) y la creación del software que necesitan los dispositivos móviles para conectarse a redes inalámbricas, asegura la propia empresa.

Pero comercializa también otros productos y servicios para aparatos que necesitan cableados, aunque donde se ha hecho realmente fuerte es en el mercado de redes inalámbricas, donde actúa como proveedor para grandes fabricantes de telefonía móvil e inalámbrica como Apple y Samsung, a quienes cobra por el uso de sus patentes.

Fueron pioneros en la fabricación de tecnologías inalámbricas 3G (tercera generación), 4G (cuarta generación) y ahora es también líder en 5G (quinta generación).

Su volumen de negocio anual en 2018 fue de algo más de US$21.000 millones, de acuerdo con el reporte financiero de la compañía, con un beneficio de más de US$6.000 millones.

Números que lo convierten en un gigante tecnológico, aunque no muchos lo conozcan.

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