Con su papel en película 'The Whale' (La ballena), Brendan Fraser a vuelto a la gran pantalla más fuerte que nunca. Así lo dejó demostrado luego de ganar como "Mejor actor" en los Critics Choice Awards en enero pasado.

Ahora, nominado en la misma categoría pero para los premios Oscar, el actor ha decidido abrirse y conceder una entrevista para referirse a aspectos muy personales de su vida.

En conversación con el programa de radio de Howard Stern, Brendan abordó los problemas por los que tuvo que atravesar cuando su hijo mayor, Griffin, fue diagnosticado de autismo a los dos años de edad.

"Cuando me enteré del diagnóstico de mi hijo a los 22 o 24 meses quedé muy enojado. La primera reacción que tuve fue '¿Cómo puedo solucionar esto? ¿Cuál es la cura? ¿Qué quiere decir esto?'. Fue como si me golpeasen con un bate de béisbol en la cabeza", aseguró Fraser.

"Solo pensaba 'Esto no está bien'. Me culpé a mí mismo. Pensaba: '¿Son mis genes? ¿Es por la hierba que fumé en la universidad?'"

A lo largo de los años intentó buscar un porqué que nunca llegó a saber, ya que el autismo aparece "por razones desconocidas", según le precisaron médicos y especialistas.

En relación a esto mismo, se sinceró sobre su camino hacia la aceptación: "Aprendes rápido que no había otra posibilidad", mencionó Fraser y agregó: "Este niño tiene la mayor alegría que he visto jamás, y resulta que es mi hijo".

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