Este viernes se cumplieron 21 años desde la muerte de la princesa Diana de Gales, quien falleció el 31 de agosto de 1997 tras un accidente automovilístico ocurrido en el túnel Pont de l´Alma en París, Francia.

El bombero que acudió en su rescate una vez reportado el accidente, conversó con el periódico británico "The Sun" y entregó detalles sobre el hecho.

Xavier Gourmelon, de 50 años, reveló que no sabía quién era la mujer a la que acudía a prestar los primeros auxilios tras llegar al lugar en que se encontraba el vehículo siniestrado.

"Estábamos muy cerca del lugar y nos tomó menos de tres minutos llegar allí. Íbamos en dos camiones, un equipo de diez personas, y fuimos los primeros en arribar", recordó varios años después.

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Entre los invitados que asistieron a la Boda Real entre el Principe Harry y Meghan Markle, una joven se robó los focos de las cámaras: se trata de Kitty Spencer, sobrina de la fallecida princesa Diana de Gales y prima del novio, quien llegó a la capilla de St.George's acompañada de su familia.

Una vez en el lugar, Gourmelon recuerda que "la mujer, de quien posteriormente supe que era la princesa Diana, se encontraba tirada en el piso del auto, en la parte trasera. Se movía muy despacio y vi que estaba viva".

El bombero se percató de que tenía una herida leve en su hombro derecho y le pareció que no era "nada significante".

En esa línea, Xavier Gourmelon reveló lo que fueron las últimas palabras de Diana Spencer antes de morir. Tras un par de maniobras de resucitación, recuerda que "tomé su mano y le dije que se calmara, que estaba allí para ayudarla. Ella me dijo: 'Dios mío, ¿qué sucedió?", recordó el bombero. 

Lo cierto es que tras ello, la princesa Diana sufrió un paro cardíaco que la obligó a ser trasladada hasta una ambulancia, para luego ser llevada a un hospital, donde finalmente falleció.

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